Seguramente has vivido o conoces a alguien que ha sido victima de una llamada donde el emisor te amenaza con hacerle daño a alguien de tu familia si no accedes a dar cierta cantidad de dinero en un tiempo determinado, a esto se le conoce como extorsión telefónica y es más común de lo que crees.
Este delito siempre involucra violencia, manipulación e intimidación con la finalidad de obligarte a realizar alguna acción. Tan sólo en 2020, México registró cerca de 7 mil 800 casos según datos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
Debido a que este delito utiliza la ingeniería social para atacar a la víctima, es común que esta no actúe de la manera más conveniente frente a esto, por este motivo, aquí te presentamos una guía basada en las recomendaciones brindadas por la Policía Federal a través de la página del Gobierno de México sobre cómo actuar en caso de ser victima de este delito.
1. Mantente en calma: No intentes negociar con el atacante, escucha con atención sus argumentos y evalúa la situación.
2. Interrumpe y verifica: Termina la llamada y llama al familiar/amigo en cuestión para corroborar que todo se encuentre bien. En caso de recibir otra llamada responde que se trata de un número equivocado y cuelga, incluso puedes mantener bloquear el número o mantener descolgado el teléfono.
3. Pide pruebas: solicita al secuestrador que te comunique con tu familiar, aprovecha ese tiempo para verificar la veracidad de la amenaza.
4. Informa: llama o envié mensajes de texto a la supuesta víctima dándole aviso del engaño
5. No des nada: no realices ninguna recarga telefónica, deposito o negociación económica.
6. Comunícate al 088: el número telefónico del Centro Nacional de Atención Ciudadana de la Policía Federal y proporciona los siguientes datos: número de origen, horario, argumento utilizado por el extorsionador y cualquier otro dato que se considere de utilidad.
Recuerda que este número también se puede utilizar en extorsiones como el vishing (engaños con suplantación de identidad) y en extorsiones directas.
En todos los casos se te proporcionará un experto que te guiará con recomendaciones para minimizar el daño psicológico, evitar daño económico y orientar sobre dónde puede encontrarse el familiar supuestamente secuestrado, como lo son hoteles, salas de espera en hospitales, cines, centrales de autobuses, iglesias, centros comerciales o tiendas que operan las 24 horas del día.
PL