El cantante de R&B, Robert Sylvester Kelly, mejor conocido como R. Kelly, expresó que no subiría al estrado para testificar ante los cargos de tráfico sexual, durante una audiencia con la jueza de distrito Ann Connelly,
El acusado se encuentra detenido el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn desde julio de 2019, tras haber sido acusado por crimen organizado y tráfico sexual.
A Kelly se le acusa por abuso físico, sexual y psicológico contra niños, niñas y mujeres jóvenes; también por grabar actos sexuales con ellos, usando una red de empleados suyos para reclutar víctimas.
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Por su parte, el cantante se ha declarado culpable de todos los cargos y sus abogados han argumentado que quienes lo acusan son “groupies” que quieren aprovechar su fama.
De ser sentenciado por los cargos que enfrenta, podría pasar al menos 20 en prisión; también enfrenta cargos por violar la Ley Mann.
Esta última establece que está prohibido trasladar a “cualquier mujer o niña” por fronteras estatales para realizar actos “inmorales”.
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En anteriores audiencias, personas que han testificado en defensa de Kelly han mencionado que nunca vieron al cantante abusar nunca de nadie.
Sin embargo, la fiscalía ha presentado a testigos que asguran lo contrario y que usó en el pasado a un puñado de gerentes, guardaespaldas y asistentes para reclutar a sus víctimas.
Según sus declaraciones, las personas involucradas en el modus operandi de los supuestos crímenes del intérprete de I Beleve I Can Fly, fueron sobornados para callar y permitir sus abusos.
Hasta el momento ninguna persona ajena al caso o no relacionada ha podido ver o entrevistarse con el cantante, tras ser esto mandato de la jueza de distrito para prevenir algún contagio por COVID-19.
DCN