Lewis es un perrito Galgo que en su juventud fue parte de carreras con otros de su raza, después de ser acogido por la Greyt Grays Rescue, un grupo voluntario sin fines de lucro dedicado a la salvaguarda y adopción de estos perritos para darles un hogar.
Lewis fue adoptado por una residente de Melbourne, pero su humana decidió mudarse a Italia y por supuesto que su peludo amigo emprendió el viaje con ella.
A pesar de que las aerolíneas tienen como política que los canes viajen en la bodega, los vacíos vuelos que ha provocado el Covid le dieron luz verde para viajar cómodamente en su propio asiento junto a su humana.
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Las largas piernas del perrito encontraron un perfecto parta estirarse a sus anchas, e incluso disfruto de un festín para él con motivo de sus cumpleaños.
Lewis se robó el corazón de la tripulación y las fotos muestran al tranquilo pasajero de la fila 1 disfrutando su vida lejos de las carreras.
GR