Ángel Álvaro Peña

La lana sucia se lava en casa

Por Ángel Álvaro Peña

En México la impunidad y la delincuencia se dan la mano desde hace años. Los delitos de cuello blanco dan la vuelta al mundo. Esta vez la difusión de los llamados Pandora Papers, sobre clientes de los bancos con el propósito de lavar dinero en Islas Vírgenes Británicas, un paraíso fiscal de altos vuelos, es tema del día, donde el hijo del exlíder sindical petrolero Carlos Romero Deschamps, presuntamente adquirió bienes inmobiliarios, automóviles de colección, yates, antigüedades y joyas.

Actualmente es investigado por las autoridades mexicanas junto a su padre y otros miembros de su familia por su presunta participación en un esquema de triangulación de recursos que incluye empresas fachada y transferencias internacionales.

Alejandro es uno de los tres hijos del exlíder sindical, en 2009 tomó parte del control de una compañía establecida en Islas Vírgenes Británicas, se presenta como “comerciante”. Además, declaró que sus fondos provenían de la herencia de su abuelo paterno hace 26 años, a pesar de que su abuelo nunca fue un hombre acaudalado, al contrario, las narraciones el exlíder sindical señalan que su padre fue un obrero.

Alejandro Romero Durán pudo burlar a la UIF, a pesar del rastreo exhaustivo que realizó de las cuentas del exlíder, pero la investigación internacional exhibió sus prácticas ilícitas. Así, hay otros delitos cometidos por diferentes personajes de la política del país que mantienen una estrategia que ocultan malos manejos de dinero, tráfico de influencias, monopolios, lavado de dinero, entre otras actividades; tal es el caso de Ricardo Lara, un oscuro personaje que al amparo de influencias y poderes heredados se convirtió en objeto de investigaciones dados los excesos de su muy personal estilo empresarial.

Lara surge a la sombra de un exfuncionario del entonces gobernador Miguel Alemán Valdés, llamado Sergio Maya Alemán, a quien finalmente traiciona porque se vio beneficiado con la amistad y complicidad del exsecretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, quien controló el área de Comunicaciones como propia desde que Enrique Peña Nieto era gobernador del Estado de México.

Lara tiene en Veracruz la manera de realizar negocios ilícitos impunemente, como el hecho de comprar a muy bajos precios terrenos a los ejidatarios, a quienes convenció de que en la zona de manglares no podían sembrar ni pescar, que se trataba de terrenos inútiles, para que después él mismo se encargara de construir la carretera hacia Tuxpan, con un grupo de prestanombres adquirió terrenos a viudas y campesinos que amedrentaba para apropiarse de sus tierras, que después vendiera a ambos lados de la carretera a precios muy altos.

También acaparó los terrenos de otros municipios para extraer basalto, que sirve para estabilizar las vías con el terraplén y que enviará todo en barco a Progreso, Yucatán, para la construcción del Tren Maya, donde habrá mucha demanda del material, producto de terrenos comprados con las mismas presiones a los campesinos y ejidatarios de municipios como Álamo, Cerro Azul y Tihuatlán, donde trata de acaparar todo con el disfraz de empresario decente, pero hay gente que se niega a venderle al conocer su manera de operar.

Lara tiene un depósito de basalto a cinco kilómetros del recinto portuario, donde se acumula el material, desde hace dos años, para ser vendido a la construcción del Tren Maya a través de prestanombres, porque en esa zona nadie cree en él.

Lara tiene ese depósito a una distancia muy corta del lugar donde será transportado a Progreso debido a que al estar cerca las empresas lo tienen a la mano y dejan de buscar a sus competidores y le compran a él; por otro lado, el transporte debe ser realizado por trabajadores sindicalizados, quienes han obtenido ese derecho que este deshonesto empresario viola impunemente al realizar su traslado en sus propios vehículos y con empleados contratados por él. Para taparle el ojo al macho los ocupa en una distancia muy corta que es de cinco kilómetros, debiendo ser lo correcto desde el lugar donde se extrae el material -que es de más de 50 kilómetros- hasta el recinto portuario.

Esta operación le permite no sólo pagar menos y violentar los derechos laborales, sino evadir impuestos y poder decir que es el único que tiene el material a la mano.

Una de sus empresas de nombre Triturados Santa Clara, le ha servido para triangular sus negocios ilícitos, una de sus grandes hazañas la hizo a la sombra del exsecretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, a quien conoció por medio de la familia Braniff, para hacer negocios sin importar si perjudica a campesinos, obreros, transportistas, a quienes explota según sus intereses. En Tuxpan, Veracruz, vendió los terrenos donde ahora descargan los contenedores y creó empresas afines asociado con los Braniff, con la anuencia del entonces coordinador general de Puertos y Marina Mercante, Guillermo Ruiz de Teresa.

Cuando está alegre, Lara hace alarde de conocer a todos los políticos de la 4T, incluyendo a las autoridades portuarias, civiles y uniformados, de quienes dice ser su amigo. Lo cierto es que ha gastado mucho dinero en caballos finos, en ranchos y con sus compraventas lava grandes cantidades de dinero en la entidad y otros estados.

Las investigaciones caminan por el exceso de transacciones de Lara en terrenos, casas, ranchos, facturas con empresas inexistentes, de lavado de dinero, etc. Continúan y la lupa de las autoridades está puesta en estas actividades, donde la estricta vigilancia seguramente encontrará las causas de delitos enriquecimiento inexplicable, tráfico de influencias, origen oscuro de capitales, etc.

Las investigaciones sobre capitales en paraísos fiscales seguirán y cada día habrá más mexicanos involucrados, no sólo del pasado sino del presente, como sucedió con los Pandora Papers, que descubren el camino del dinero que es la ruta más segura para descubrir grandes fraudes y colocar los reflectores de la justicia frente a los enemigos de México.

Desde luego que cuando se acusa a un empresario de deshonestidad no se califica la actuación de todos, hay lealtad y traición en todos los gremios, pero afortunadamente se trata de una minoría las personas que no cumplen con las normas de la legalidad.

Ahora que el presidente de la república asistirá a la ONU a hablar de honestidad deberá llevar nuevos trofeos de la lucha contra la corrupción, que seguramente mostrarán facetas de deshonestidad que sorprenderán a más de uno.

PEGA Y CORRE. – Lorenzo Córdova comparecerá ante el pleno de la Cámara de Diputados el 5 de noviembre, lo que será el inicio del fin de esta camada de consejeros o su fortalecimiento. Dependerá de la manera en que pueda comunicarse el triunfo o la derrota de la vieja autoridad electoral. De entrada, anuncia el consejero que dará a conocer la manera de transparentar la ejecución de recursos de la Nación, tema que nada tiene que ver con su actividad, pero que anuncia como para desarticular su comparecencia… Esta columna se publica los lunes, miércoles y viernes.

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