La del Covid-19 ha sido una pandemia que llevó la crisis hasta la puerta de las economías más grandes del mundo. En Cuba, con más de 11 millones de habitantes, y blanco de un cerco económico impuesto por Estados Unidos, la situación pudo tener un alivio gracias al desarrollo de sus propias vacunas que, según cifras oficiales, tienen protegida a 82% de la población.
La isla ha abierto sus puertas nuevamente al turismo, y es el país con la mayor tasa de vacunación en el Caribe, lo que le ha permitido además retomar actividades como clases presenciales en todos sus niveles.
La investigación de vacunas propias comenzó en 1980, todo a raíz del embargo impuesto por Estados Unidos, casi veinte años antes, en 1962. Desarrollar una vacuna contra el Covid-19 no era una carrera, era un paso necesario para la supervivencia de la isla.
Con la llegada de la pandemia, el cierre de fronteras fue la medida que mantuvo a los cubanos lejos del colapso sanitario… por un tiempo. Una breve reapertura para un país que cimenta buena parte de su economía en el turismo era, por lo menos, necesaria. Pero la llegada de la variante Delta provocó el disparo de contagios y muertes, el sistema hospitalario entró en crisis y sus doctores denunciaban en redes sociales la falta de insumos médicos básicos que hicieran posible su labor, había escasez de cubrebocas, gel antibacterial y hasta de jeringas requeridas para continuar con la campaña de inmunización.
En mayo, la isla inició su campaña de vacunación con los biológicos de desarrollo propio, Abdala, Soberana 02 y Soberana Plus. La primera etapa, para la población adulta, tenía por propósito inmunizar al 70% de la población para el mes de agosto, y al 100% para el final del año. Aunque no se cumplieron, Cuba no está lejos de cumplir con sus ambiciosas metas, pues hoy 82% de sus ciudadanos ha tenido acceso a un esquema completo de vacunación, incluyendo a menores de 18 años.
CIFRAS
28, 651, 157
dosis anticovid se han
inyectado en la isla
8, 311
muertes en el registro
oficial de la nación
Personalidades piden liberar a presos políticos
Unas 300 personalidades del mundo del arte y la cultura de numerosos países, como Mario Vargas Llosa, Isabel Allende y Meryl Streep, pidieron este miércoles al gobierno cubano que libere a “todos los artistas detenidos arbitrariamente” en la isla, sacudida este año por brotes de protestas.
“Debe respetar la libertad de expresión, liberar a los artistas que han sido detenidos arbitrariamente, desistir de cargos penales abusivos y permitir que quienes están en el exilio puedan regresar a su país”, reclama en un comunicado la ONG Human Rights Watch.
En la carta abierta destacan escritores de prestigio internacional como Vargas Llosa, Elena Poniatowska, Isabel Allende, Orhan Pamuk, Paul Auster, Zadie Smith, J. M. Coetzee, Jules Feiffer o Chimamanda Ngozi Adichie.
En la larga lista también figuran la actriz Meryl Streep y artistas cubanos como Tania Bruguera, Coco Fusco y Hamlet Lavastida, muchos fuera de la isla.
El 27 de noviembre de 2020, unos 300 artistas se manifestaron en La Habana para reclamar más libertad de expresión. El movimiento abrió la puerta a una serie de protestas en Cuba hasta las del 11 de julio, las más importantes desde la revolución de 1959.
Los intérpretes de la canción “Patria y Vida”, casi un himno del movimiento, Luis Manuel Otero Alcántara y Maykel Castillo, “siguen en prisión preventiva y enfrentan cargos penales injustos o infundados”.
EU alerta no viajar a México por Covid e inseguridad
El Gobierno de Estados Unidos emitió una alerta de viaje a México por alto riesgo de contagio de Covid-19, y de inseguridad en algunas entidades. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades emitieron una alerta sanitaria para viajes Nivel 3, lo que implica un alto riesgo de contagio.
La recomendación para los estadounidenses es reconsiderar sus viajes al territorio mexicano y, en su defecto, revisar los niveles de transmisión de sus destinos específicos. También se hizo un señalamiento puntual para no viajar a 16 entidades, como Guerrero, Michoacán, Sinaloa y Tamaulipas, por la prevalencia de delitos y secuestros.
LEG