El vicecoordinador de la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto, Jorge Carlos Ramírez Marín, acusó a la izquierda de mantener al país en la “etapa de reacción, lamento y queja”, y no permitir entrar a la construcción de acuerdos en beneficio de los mexicanos.

 

En entrevista, el político del Partido de la Revolución Democrática (PRI) admitió que la izquierda es un elemento indispensable para la construcción de las reformas que requiere el país, además de que gobierna la capital de la República.

 

Ramírez Marín aseveró que la izquierda mexicana “tiene aportaciones fundamentales que hacer en este proceso de acuerdos que hay que construir”, y que el jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, debe asumir una actitud de liderazgo de esa izquierda que quiere surgir y construir en el país.

 

Aunque aclaró que no califica las intenciones de Ebrard de buscar competir en la elección presidencial de 2018, pues hay un tramo muy largo, pero el jefe de gobierno y otros activos importantes de la izquierda van a jugar un papel importante en los próximos años.

 

Advirtió que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) está en la disposición de buscar acercamientos con todos los partidos, incluidos con sus alas radicales para que hagan sus aportaciones en este proceso de acuerdos que hay que construir.

 

No sólo el Partido de la Revolución Democrática (PRD) tiene su ala radical, también el PAN y PRI. dijo, al señalar que es necesario “que el radicalismo encuentre un punto en donde lo más importante sea para todos la construcción del país y no que nos den la razón”.

 

El también diputado federal del partido tricolor confió en que se puedan lograr los acuerdos con todas las fuerzas políticas, porque no sólo las izquierdas sino también el Partido Acción Nacional (PAN) jugará un papel determinante en los próximos años.

 

Por lo anterior, Ramírez Marín llamó a esas fuerzas políticas a alejarse de las coyunturas para ver el futuro del país.