La situación en torno a Ucrania ha reavivado el juego de alianzas y desencuentros que se gesta entre las naciones. Esta semana, Kiev, capital ucraniana, tiene su agenda llena con la visita de mandatarios y diplomáticos que demuestran simpatía con su posición en el conflicto… y con el bloque de la OTAN.
Por un lado, el primer misnistro británico, Boris Johnson, fue a visitar al presidente Volodímir Zelenski, y lo hizo mientras su puesto pende de un hilo y el Parlamento le da la espalda. La diplomacia rusa no dudó en criticar la presencia de Boris y calificarla de “inservible”.
Pero el polémico premier no es el único caso. Hoy, el presidente turco, Tayyip Erdogan, también visitará Kiev para mostrar su apoyo a la nación y a la postura de la OTAN, a pesar de que en el pasado también fue capaz de mantener buenas relaciones con Moscú. La relación de Turquía con occidente se vio trastocada con la adquisición de armamento ruso, y luego afectó los intereses rusos con el suministro de drones a los ucranianos para la batalla de Crimea en 2015.
Putin visitará China este viernes para la inauguración de los Juegos de Invierno. La consejería del Kremlin ha asegurado que “China entiende la necesidad de un orden mundial más justo”.
CON INFORMACIÓN DE AFP
LEG