El presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Pedro Joaquín Coldwell, sostuvo que se debe abrir paso a la etapa de los acuerdos virtuosos que el país requiere para volver a crecer.
Al inaugurar los trabajos de la Reunión Plenaria de los Diputados Federales del PRI, el dirigente nacional priista advirtió que “no podemos distraernos” en “reyertas inútiles”, sino que deben ver hacia adelante, y construir desde ahora oportunidades para niños y jóvenes.
En el acto, efectuado en el Palacio Legislativo de San Lázaro, afirmó que los problemas del país que ameritan la atención de los legisladores federales crecen con celeridad y se van acumulando, por lo que no hay espacios ni tiempo para pausas ni para actitudes contemplativas.
Sin embargo, destacó que si se aplican las reformas estructurales laboral, energética fiscal, anticorrupción y de transparencia, propuestas por su partido, “México puede crecer aceleradamente y crear empleos y abrir oportunidades a los jóvenes”.
En su mensaje, dijo a los diputados que tomarán protesta el 29 de agosto en el pleno del Palacio Legislativo de San Lázaro, que deben tener un sentido de trascendencia en su paso por esta soberanía, inscribiendo huellas profundas de su quehacer legislativo en su vida personal.
El dirigente priista abundó que con las reformas que propondrán, como la fiscal, la energética y la laboral, así como la iniciativa para crear la comisión antirrupción, se reivindica el poder de la supervisión y la sanción social, además de establecer un equilibrio de poderes entre los constituidos y el creciente de los ciudadanos.
A su parecer, el candidato presidencial de la coalición Compromiso por México, Enrique Peña Nieto, representa la posibilidad de una renovación total del panorama mexicano, la opción de cambiar los problemas del atraso hacia de los problemas del progreso.
De acuerdo con Joaquín Coldwell, México puede ser más grande y justo en poco tiempo “si nos comprometemos con el cambio”, que es muy necesario para dejar de ser “el país de la inequidad, de la pobreza, de la inseguridad y de la violencia; de la informalidad y la piratería”.
Empero, precisó que la reforma hacendaria que plantearán debe acompañarse por iniciativas anticorrupción y de mayor calidad y transparencia en el ejercicio del gasto público, porque nadie estará dispuesto a enfrentar mayores sacrificios tributarios si el gobierno está inmerso en la opacidad y el dispendio.