Alejandro Moreno se ha convertido en un lastre para el PRI y para la alianza Va por México. Antes de los escándalos del priista, esa coalición estaba en riesgo de perder cinco de las seis gubernaturas que se disputarán el domingo. Alito ha logrado poner peor el escenario, podría perder seis de seis.
Los audios en los que se le escucha, dados a conocer por la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, evidencian a un personaje prepotente, soez y sin moral alguna para presidir un partido que de por sí está en vías de extinción.
El domingo habrá elecciones en Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas. Desde el inicio de las contiendas se vislumbraba un escenario complicado para el PRI y aliados, pero los posibles actos de corrupción del priista podrían ser la diferencia para perder todas.
Moreno es insostenible. Su presencia en el PRI solo acelera la muerte de ese partido. Pone también en riesgo la alianza con el PAN y PRD que deberán valorar la conveniencia de mantenerse unidos a un partido cuyo dirigente está embarrado de lodo.
AMLO dinamita alianza opositora
El presidente López Obrador ha centrado su estrategia en dinamitar la alianza opositora y lo está logrando. A unos días de las elecciones, utilizó a Sansores para evidenciar posibles actos de corrupción de Moreno.
El priista se dice víctima de una venganza por el rechazo a la reforma eléctrica y respondió con otro audio. Como Judas, traicionó a su “hermano” Manuel Velasco, quien sirvió de mensajero del secretario de Gobernación, Adán Augusto López, para advertirle que si no “jalaba” se le iban a ir con todo.
Los audios, sin duda, degradan la política, pero retratan de cuerpo entero al priista. ¿Cuántos negocios habrá hecho al amparo del poder? ¿Cuántas llamadas habrá grabado para utilizarlas para sus intereses personales?
¿Qué va a pasar después del 5 de junio cuando el PRI, nuevamente bajo el mando de Moreno, salga derrotado? Los priistas están agazapados, pero afilan los cuchillos. Está próxima la hora de cobrarse viejos y recientes agravios.
El 6 de junio podría ser el inicio del fin del campechano. ¿Habrá alguien que levante la mano para dirigir y tratar de salvar al viejo partido?
Directo. Inverosímil que el dirigente del PAN, Marko Cortés, haya salido a defender a Moreno: “Espiar y difundir grabaciones para amedrentar y presionar, son actos propios de una dictadura”. ¿En verdad con ese PRI quieren hacer alianza? Si es así, perderán nuevamente en 2024. ¿Qué pensarían personajes como Gómez Morín, González Luna, Castillo Peraza?
Indirecto. Terminaron las campañas y todo está en manos de los ciudadanos. De los seis estados en disputa cuatro podrían ser gobernados por mujeres: Aguascalientes (Tere Jiménez y Nora Rubalcava), Durango (Marina Vitela), Hidalgo (Carolina Viggiano) y Quintana Roo (Mara Lezama y Laura Fernández). En Hidalgo aseguran que Viggiano es la verdadera alternancia, pues nunca ese estado ha sido gobernado por una mujer. Veremos.
@maurijua