A dos años de la siguiente elección presidencial, el sucesor del presidente Andrés Manuel López Obrador enfrentará un panorama económico y político complicado debido al deterioro de las condiciones, apuntaron economistas de Citibanamex.
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“Creemos que el próximo presidente no va a gozar de las condiciones macro que existían cuando López Obrador llegó al poder en 2018, creo que las condiciones van a estar más deterioradas en 2024, ni tampoco tendrá las mayoría en el Congreso, como llegó el presidente López Obrador”, señaló Nydia Iglesias, subdirectora de análisis político en Citibanamex.
Independientemente de quién sea el siguiente presidente, el próximo mandatario o mandataria enfrentará los desafíos de asumir una postura más negociadora con la oposición, así como de moderar algunas de las visiones por las que se ha caracterizado la administración lopezobradorista, como es el caso de la política energética.
“Las condiciones generales que asumirá el próximo Gobierno sea de Morena o de la oposición van a estar más deterioradas y van a ser más retadoras, tanto para el propio Gobierno como para la oposición que negocie el programa con el que intentará salir adelante en los próximos seis años”, agregó.
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Adrián de la Garza, economista en jefe de Citibanamex, añadió que en el tema de la economía se complica aún más con elevados niveles de inflación y una posible desaceleración en la actividad económica.
Si bien sostuvo que no podrían determinar qué implicaciones económicas se podrían esperar en un escenario en el que gane Morena la elección presidencial para 2024, dado que no se puede garantizar el seguimiento de los pilares de gestión económica del presidente López Obrador, será un panorama complicado.
“Más que una política económica de Morena, definimos una política de López Obrador, que de hecho la llamamos Amlonomics, y esto tenía muchas características, todo el tema de programas sociales, este centralismo en la manera en que se toman las decisiones económicas y políticas en el país, la política nacionalista, etcétera”, apuntó.
Añadió que la pensión para adultos mayores, uno de los principales programas sociales de la actual administración, será muy difícil mantenerlo porque no hay recursos que sean sostenibles hacia adelante, al menos que haya una reforma integral y exhaustiva.
“Pero también va a ser muy difícil retirarla porque entonces, a lo mejor, lleguemos a ver lo que hemos visto en otros países de Latino América, protestas, revueltas, y manifestaciones muy contundentes, en algunos casos muy violentas, señaló.
LEG