Ayer por la tarde, se detalló una guerra de declaraciones entre Elba Esther Gordillo, presidenta vitalicia del SNTE, y Claudio X. González Guajardo, presidente de Mexicanos Primero y cofundador de Fundación Televisa.

 

La semana pasada, la organización civil Mexicanos Primero mostró, por tercer año consecutivo, los resultados del programa ¿Dónde está mi maestro?, que indican que 45 mil 753 comisionados y profesores con licencia le cuestan al Estado mil 727 millones de pesos, de los cuales 49% está asignado a “actividades sindicales”.

 

Y ayer reaccionó el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE). En un comunicado lamentó que organizaciones “sin ninguna calidad moral ni social como Mexicanos Primero” y “con fines particulares” busquen “debilitar al sindicato y, más adelante, debilitar a la escuela pública”.

 

Acusó que el presidente de la organización no tiene calidad moral, ya que “elude el pago de impuestos a través de esquemas como Bécalos (cuyos ingresos aporta la sociedad y él los aprovecha convirtiéndolos en deducibles de impuestos para dicha organización)”.

 

El SNTE no hizo el menor intento por justificar el dispendio que documentó González Guajardo.

 

Horas después del comunicado, reviró González Guajardo -hijo de Claudio X. González Laporte, CEO de Kimberly Clark, ex líder del CCE y el mexicano con más cargos dentro de consejos de administración.

 

“Acusando recibo del rechazo de los ciudadanos al abuso multimillonario que significa el gasto en comisionados sindicales, (…) la cúpula del SNTE sigue intentando aferrarse a prebendas malhabidas y a un accionar que atrasa y pretende bloquear la transformación educativa del país”, apuntó Mexicanos Primero en un comunicado.

 

En el comunicado llamado “Para que la educación pública no sea una mercancía, el SNTE necesita rendir cuentas”, se lee: “Llama la atención que en su comunicado, el SNTE no mencione nada a propósito del reclamo que hacemos a las autoridades para que dejen de pagarse del erario público las comisiones y licencias sindicales de al menos 22 mil personas”, agrega.