Durante 2021 –según la Cuenta Pública– el Gobierno federal recortó 227.9 millones de pesos a los principales programas de becas de la autoproclamada cuarta transformación, lo que equivale a quitar al menos 18 mil apoyos a niños y jóvenes por un año.
De acuerdo con el informe del gasto real del año pasado, en el rubro de Educación se tenían programados ocho mil 942 millones de pesos en las becas Benito Juárez para alumnos de educación básica, pero se erogaron 163.6 millones de pesos menos.
Con este instrumento, la administración federal apoya con 840 pesos mensuales a los beneficiarios de manera universal y sin necesidad de contar con otros requisitos, como una calificación específica.
A su vez, a las becas Elisa Acuña les disminuyeron 9.4 millones de pesos, al pasar de 200.5 a 191 millones de pesos. Dichas ayudas se entregan a egresados y docentes de instituciones públicas de Educación Superior para que continúen su profesionalización.
Para el programa de Jóvenes Escribiendo el Futuro, el recorte fue de 35.1 millones de pesos, al pasar de mil 17 millones aprobados a un gasto real de 982.4 millones de pesos; este apoyo se entrega a universitarios, con un monto mensual de 2 mil 450 pesos y tiene énfasis en los institutos de Bienestar, normales rurales, universidades en pueblos indígenas e interculturales.
A su vez, las becas Benito Juárez, en su vertiente de educación media superior, recibieron 19.6 millones de pesos menos de los programados durante el año pasado.
Los recortes a los principales programas de becas se dieron en 2021, un año antes de que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunciara que su administración pasaría de la austeridad republicana a la pobreza franciscana en el ejercicio del gasto público.
En caso de que este año también se hayan aplicado disminuciones presupuestales a los programas de becas, éstas se conocerán cuando se emita la Cuenta Pública 2022. A la fecha, una de las críticas en el sector educativo ha sido la eliminación del programa de Escuelas de Tiempo Completo.
ESCENARIO 2022
24 HORAS publicó ayer que el Gobierno federal, en el primer semestre de 2022, asignó recursos a las obras insignia del Gobierno federal y castigó a Salud, Educación y Seguridad Pública.
De acuerdo con el reporte financiero de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), se inyectó al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) 951 millones de pesos, aunque el subsidio original era de 419.4 millones de pesos.
Según el reporte de Hacienda, el presupuesto asignado para la refinería Olmeca, en Dos Bocas, Tabasco, fue de 46 mil 162 millones de pesos; sin embargo, al segundo semestre ya acumulaba un gasto de 92 mil 15 millones de pesos; es decir, 45 mil 953 millones más de lo programado.
Mientras que el Tren Maya, cuyo presupuesto se encuentra en el sector turismo, al corte del segundo semestre, recibió 20 mil 901 millones de pesos extras, pues su presupuesto original era 31 mil 311 millones y pasó a 52 mil 212 millones de pesos.
LEG