Durante el primer día del operativo para localizar ambulancias irregulares, el Gobierno capitalino, a través de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México (SEDESA), la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y el Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano (C5), detuvo a dos unidades particulares y una fue llevada al depósito vehicular del Gobierno capitalino.
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Una de las unidades detenidas portaba una matrícula del Estado de México y correspondía a un vehículo de carga; por lo que se le colocó un candado para evitar que siguiera circulando, debido a que no contaba con los elementos para ofrecer el servicio de Atención Médica Prehospitalaria y una grúa la trasladó al depósito.
La segunda unidad fue detenida por la Policía de Tránsito debido a que no portaba matrícula para circular y su engomado correspondía a un vehículo particular; sin embargo se le permitió seguir su marcha, ya que trasladaba a un paciente a un hospital del estado de Morelos.
Cabe destacar que la Secretaría de Gobierno local estableció una mesa de trabajo con representantes del personal que atiende las ambulancias privadas en la capital a efecto de exhortarlos a cumplir el Programa de Fortalecimiento de Atención Prehospitalaria, así como para atender sus inquietudes relativas al reglamento.
Esto luego de que en los últimos días, estas personas realizaran diversas manifestaciones en contra de los operativos para detectar ambulancias irregulares.
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A la propuesta vertida por el gremio de ambulancias sobre alargar el plazo para el inicio de los operativos, las autoridades coincidieron que han transcurrido seis meses desde que se anunció la regularización de las unidades, las cuales deberían cumplir los requerimientos mínimos indispensables para operar.
LEG