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Foto: Cuartoscuro / Colectivos demandan que sean las autoridades quienes busquen a los deudores, no las exparejas  

La Red de Mujeres en Acción entregó a diputadas de todas las fracciones parlamentarias en la Cámara de Diputados, una iniciativa para que las Unidades Estatales de Supervisión a Medidas Cautelares y Suspensión Condicional del Proceso (UMECAS), sean quienes coadyuven a la localización a los deudores alimentarios y no sean las esposas o exesposas las encargadas de hacerlo.

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Ataviadas con vestido de novia, las activistas dieron una conferencia de prensa en la Cámara de Diputados y recibieron el respaldo de legisladoras de todas las fracciones parlamentarias en San Lázaro.

“Actualmente, sólo en 42 juzgados de la Ciudad de México se puede llegar a tener hasta cuatro mil demandas anuales de alimentos, porque se ha incrementado el número de mujeres que son abandonadas junto con sus hijos”.

“Existen, además 88 mil menores víctimas de la violencia vicaria en el país, esto es, el uso de la violencia contra los hijos para dañar a la madre (…) este abandono genera, además, una doble orfandad de los menores, la del padre que se fue y la de la madre que tiene que salir a buscar los alimentos”, explicó Ana Correa, de Red de Mujeres en Acción.

La diputada Mary Carmen Bernal (PT) se comprometió a retomar la propuesta, llevarla al grupo de trabajo, a propósito de que se está modificando el Código Nacional de Procedimientos Civiles y Familiares.

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“Esto va muy acorde con la demanda que ustedes en estos momentos están proponiendo y nos comprometemos a hacer su voz en este grupo de trabajo, que será un Código completamente nuevo.

“Nos comprometemos a que queden plasmadas sus inquietudes, a que queden plasmadas sus demandas en este cuerpo legislativo que estamos elaborando justamente en estos meses, y quiero decirles que en el mes de diciembre será aprobado”, dijo.

El término de violencia vicaria fue acuñado por la psicóloga clínica y feminista Sonia Vaccaro, quien lo define como “la expresión más cruel de la violencia de género”, en la que el agresor, generalmente la expareja aunque también pueden ser familiares cercanos a la víctima, busca dañar a la mujer a través de sus hijos.

 

LEG