Cada día que pasa se ahondan más las diferencias entre el rector de la Universidad de Guadalajara (UdeG) Ricardo Villanueva Lomelí y el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro; ahora el nuevo capítulo en esta serie de desencuentros tiene que ver con el presupuesto del próximo año para la casa de estudios, el cual es considerado por el académico como el peor de los últimos 30 años.

Y es que el Gobierno estatal está proponiendo una asignación de recursos a la UdeG de 14 mil millones de pesos para el próximo año, un aumento de 6.7%, lo que el rector considera insuficiente pues ese porcentaje ni siquiera es el equivalente a la inflación.

Ante esta situación, el rector Villanueva convocó a una manifestación para el próximo 23 de noviembre para exigir al Gobierno de Enrique Alfaro y al Congreso del estado que no abandonen a los jóvenes de Jalisco y, en consecuencia, se asigne un presupuesto justo a ese centro de estudios.

A decir del rector, en este momento las universidades públicas están viviendo sus peores años en el país, pues de acuerdo a la ANUIES estos centros, como el de Guadalajara, están creciendo su matrícula en 19%, mientras que ha disminuido en 24% su presupuesto por alumno a nivel federal.

De acuerdo a cifras oficiales, en 2015 la Universidad de Guadalajara recibía un presupuesto por alumno de casi 29 mil pesos, cantidad que disminuyó sustancialmente, ya que, para el próximo año, será de apenas 20 mil pesos por alumno, y esta reducción está ocurriendo pese a que, en los últimos cuatro años, esta casa de estudios ha registrado un incremento de 41 mil nuevos estudiantes.

El rector considera que, con una asignación justa de recursos, se puede aspirar a un crecimiento de la matrícula de hasta 60 mil 500 espacios más, con proyectos que se tienen contemplados para arrancar en Chapala, Tlaquepaque, Tlajomulco y Tonalá, así como la apertura de tres nuevas preparatorias.

Seguramente el Gobierno de Enrique Alfaro sabe que hoy más que nunca es indispensable contar con más oportunidades de estudio para los jóvenes, pues el tener una buena oferta educativa es uno de los pasos principales para comenzar a restablecer el tejido social que, en los últimos años se ha visto seriamente dañado ante la proliferación de grupos criminales.

LA MARCHA DEL DOMINGO

Buen poder de convocatoria tuvieron los organizadores de la marcha en defensa del INE, pues este tipo de manifestaciones se replicaron en al menos 50 ciudades a lo largo y ancho del país.

Independientemente del número de asistentes, el Gobierno federal y Morena deben tomar en cuenta el mensaje que se manda: No a la vulneración del Instituto Nacional Electoral; pero los organizadores también deben tener claro que, la del domingo no fue una manifestación en rechazo al Gobierno de la 4T.

Así que, ambas partes tienen que valorar, esa marcha, en su justa dimensión.

 

 

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@JuanMDeAnda