El inspector general del Departamento de Justicia, Micahel Horowitz, anunció hoy que hará un seguimiento de la aplicación de las recomendaciones hechas al procurador Eric Holder derivadas de las fallas de la operación “Rápido y Furioso”.

 

En una audiencia del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, Horowitz señaló que Holder tiene un plazo de 90 días para responder y presentar un calendario de instrumentación de las reformas propuestas en el informe final.

 

“Nuestra meta es darle seguimiento y asegurarnos que las cosas se hagan… Si las recomendaciones no son acatadas, se hará un nuevo reporte al Congreso o al procurador, o a otros, de que no se ha cumplido”, dijo a los legisladores.

 

El inspector general planteó en su informe una serie de recomendaciones, incluida la de mejorar la coordinación entre los componentes policiales del Departamento de Justicia y reforzar el proceso de revisión de solicitudes de intervención telefónica.

 

Horowitz respondió así a un comentario del demócrata de más alto rango Elijah Cummings, quien sostuvo que sería lamentable que el Congreso no hiciera nada luego de descubrirse las fallas y errores de funcionarios y agentes por “Rápido y Furioso” y “Receptor Abierto”.

 

Cummings señaló asimismo que debe haber una plena rendición de cuentas a nivel institución, una alusión a los funcionarios identificados como principales responsables de la concepción y ejecución de los operativos.

 

Durante la audiencia el presidente del Comité, el republicano Darrell Issa, sugirió que los 14 agentes y burócratas criticados deberán ser removidos del Departamento de Justicia y dedicarse a otro trabajo donde no tengan que rendir cuentas.

 

Asimismo reconoció que de no haber sido por la muerte del agente estadunidense de la Patrulla Fronteriza (PF) Brian Terry, en diciembre de 2010 al sur de Arizona, probablemente no se habría detenido la polémica táctica de permitir el ingreso ilegal de armas a México.