En días pasados, la empresa Microsoft presentó a los usuarios de internet en Estados Unidos un peculiar reto, que nos hace recordar lo que hace casi tres décadas pusiera en práctica Pepsi, una iniciativa conocida como “El reto Pepsi”, ingeniosa estrategia de mercadotecnia orientada a demostrar a los consumidores de refrescos que Pepsi era preferido por la mayoría frente a su histórico rival de la conocida “Guerra de las colas”.
Accediendo al sitio www.bingiton.com, los usuarios estadunidenses efectúan cinco búsquedas en internet, teniendo para cada una dos respuestas posibles y seleccionando la que más le satisfaga. Al final, el sitio señala cuál buscador fue el preferido del usuario, Bing de Microsoft, o Google. La empresa basada en Redmond, Washington, parte de la premisa de que el uso de Google es un hábito y quiere demostrarlo mediante este reto.
En sus primeras semanas, Microsoft presenta datos favorables a su buscador, pues casi el doble de usuarios prefirieron sus resultados sobre los de Google de acuerdo con un estudio ajeno a Microsoft. En su momento, Pepsi también logró resultados positivos en el corto plazo, que no se tradujeron en beneficio de largo plazo. Pero en el mundo de la tecnología, volteretas como la que ahora Microsoft busca dar, y Pepsi intentó en algún momento, han sido prácticamente una constante. Revisemos algunas.
Durante la era de la burbuja punto com (1999 aproximadamente), algunos de los sitios más relevantes de entonces eran Yahoo!, Lycos, Altavista, y en Latinoamérica, sitios como Starmedia, por ejemplo. No existían los nombres que son tan cotidianos el día de hoy: YouTube, Facebook, Amazon, Twitter, etc. Todos los aquí mencionados de aquella época, hoy son prácticamente irrelevantes y el mayor sobreviviente, Yahoo!, hoy tiene una realidad muy distinta, al menos en lo que fue su mercado, las búsquedas, al dejar de desarrollar tecnología de búsqueda para adoptar el algoritmo de Bing.
Otro capítulo interesante se jugó en la arena de los navegadores de internet. Quizá recuerden la posición tan dominante que alguna vez tuvo Netscape Navigator, que llegó a concentrar más de 90% del mercado de navegadores. Hasta que llegó Internet Explorer de Microsoft, quien, apalancándose de la fuerte penetración de su sistema Windows poco a poco fue instalándose en el gusto del consumidor hasta prácticamente matar a Netscape. De la misma forma, la empresa de Bill Gates empujó su reproductor de audio y video, Windows Media Player, que logró ser casi un estándar hasta que llegó Apple y el fenómeno iTunes, con el que la empresa de la manzana se abrió a operar en equipos con Windows y cambió completamente el juego de los reproductores de contenido multimedia.
Y así podríamos seguir. Napster siendo todo, y ahora nada. ICQ como mensajero estándar, luego Messenger, y ahora Facebook.
En el mercado de internet, un mercado de innovación frente a otros más consolidados en el consumidor como los refrescos, el usuario online puede cambiar sus hábitos en un abrir y cerrar de ojos. El reto Bing, más allá de ser una divertida, retadora, e innovadora estrategia de mercadotecnia, puede ser el principio de una nueva voltereta en la industria de la tecnología. Veremos.
@jorgetaboada