En lo que va de la administración, el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras) y el Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin) otorgaron alrededor de 140 mil millones de pesos en proyectos con participación privada.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) destacó que con estos esfuerzos de Banobras y el Fonadin se impulsa una inversión estimada de 650 mil millones de pesos en diversos proyectos estratégicos para el país, lo que representa un efecto multiplicador cercano a cinco veces.
Señaló que en los últimos años se ha incrementado el financiamiento para infraestructura económica en carreteras, puertos, logística, gasoductos o plantas de generación de energía, así como para servicios con alta rentabilidad social como el transporte público, acceso a agua potable y tratamiento de basura.
Se trata de elementos esenciales para elevar la productividad de las industrias, regiones y personas con el fin de aspirar a mayores niveles de crecimiento en el mediano y largo plazo, resaltó la dependencia federal en el Informe Semanal de su Vocería.
Refirió que el incremento del financiamiento para infraestructura en México es resultado de las reformas estructurales en materia financiera y energética, así como del impulso a la participación del sector privado.
Esto último, agregó, a través de nuevos productos financieros y de las Asociaciones Público-Privadas (APPs) que promueven un reparto eficiente de riesgos y generan mayores montos de inversión, lo que permite compensar en gran parte las restricciones presupuestales del sector público.
A la par, la reforma financiera permitió a la banca de desarrollo contar con mayor autonomía en su operación, definir productos y esquemas que ofrecen mejores condiciones financieras, así como asumir mayores riesgos para atender estrictas medidas prudenciales.
Por su parte, la reforma energética, abrió oportunidades de inversión en el sector y favorecer el desarrollo de proyectos de energías limpias.
La Secretaría de Hacienda destacó que la ejecución de dichas acciones se traduce en mayores niveles de financiamiento bancario en infraestructura, con una participación creciente de la banca comercial.
Señaló que en lo que va de la actual administración, el Banobras alcanzó resultados que fortalecieron su papel en el financiamiento al desarrollo de infraestructura.
Los esfuerzos para otorgar e inducir crédito se vieron reflejados, al cierre de 2016, en un saldo total de la cartera de crédito directo e inducido que ascendió a más de 505 mil millones de pesos, informó.
Dicha cartera mostró un crecimiento de 12.5 por ciento con respecto a 2015 y, un incremento acumulado de 87 por ciento entre 2012 y 2016, añadió la dependencia federal.
Sobre el financiamiento a proyectos de infraestructura con participación privada, en 2016 Banobras brindó e indujo créditos por 30 mil millones de pesos, monto que contribuyó a alcanzar más de 123 mil millones de pesos de recursos otorgados e inducidos en lo que va del sexenio.
Resaltó que por primera vez en la historia de Banobras, aprovechando las nuevas oportunidades que generó la reforma energética, el año pasado la mayor parte del otorgamiento de crédito fue para el sector energético, incluyendo proyectos de energía renovable.
El fondeo a bancos privados alcanzó su mayor nivel, con lo que la banca tiene ahora un papel más relevante en el financiamiento a la infraestructura, subrayó la Secretaría de Hacienda.
Además, Banobras administra el fideicomiso más grande del país enfocado al financiamiento de proyectos de infraestructura con participación privada, bajo el nombre de Fondo Nacional de Infraestructura.
Indicó que a través del Fonadin, se han destinado más de 50 mil millones de pesos para proyectos en distintos sectores estratégicos, y el Fondo autorizó apoyos financieros por 71 mil millones de pesos, que impulsan el desarrollo de diversos estudios y proyectos.
Entre los proyectos financiados por Banobras en 2016 destacan obras como el gasoducto Los Ramones II Sur; la terminal de carga en el Puerto de Tuxpan; el inicio del libramiento de Hermosillo; los parques eólicos Ventika I y II y La Bufa; el hospital del ISSSTE en Mérida; así como con el apoyo del Fonadin.
También, los estudios para el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, la continuación de las obras de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales “Atotonilco”, la más grande de su tipo en América Latina, el BRT de la Zona Metropolitana de Oaxaca.
Además financió los estudios para el desarrollo del sistema integral de transporte de la Zona Metropolitana de la Laguna y la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales en Bahía de Banderas, Nayarit.
De esta forma los esfuerzos de Banobras y el Fonadin en proyectos con participación privada, en lo que va de la administración, ambos instrumentos gubernamentales otorgaron alrededor de 140 mil millones de pesos, sin considerar refinanciamientos ni crédito inducido.
La Secretaría de Hacienda informó que con ello se impulsa una inversión estimada de 650 mil millones de pesos en diversos proyectos estratégicos para el país, lo que representa un efecto multiplicador cercano a cinco veces.
Banobras promueve además el desarrollo de infraestructura con alta rentabilidad social en estados y municipios, al haber otorgado créditos directos e inducidos por alrededor de 170 mil millones de pesos, de los cuales 21 por ciento se canalizó en 2016, es decir, 36 mil millones de pesos.
Refirió que como parte de los proyectos en estados y municipios destacan algunos financiados en coordinación con organismos financieros internacionales.
En el marco del Programa de Transformación del Transporte Urbano (PTTU) que ofrece Banobras con recursos de Banco Mundial y del Fondo de Tecnología Limpia, se canalizaron recursos para proyectos amigables con el medio ambiente, como el Sistema Integral de Transporte de Tijuana y la línea 1 del Tren Ligero de Guadalajara, a tasas muy competitivas.
Afirmó que los resultados de Banobras en sus principales líneas de negocios también se observan en la salud financiera y sostenibilidad de la institución, cuyos niveles de morosidad y capitalización so de los más sólidos del sistema bancario mexicano.
Para 2017, Banobras refrendó su compromiso de hacer equipo con la banca comercial y el sector privado para inducir más financiamiento mediante el diseño de nuevas garantías que cubran riesgos específicos como el de demanda o asociados a factores sociales o de tenencia de la tierra.
Asimismo, a través de un mayor impulso a las APPs, particularmente en aquellos proyectos que fortalezcan la competitividad y sustentabilidad de las ciudades y de las industrias como el transporte público y el acceso a energías limpias, a través de mejores condiciones financieras.
La Secretaría de Hacienda apuntó que el Banco analiza oportunidades para incrementar la participación de APPs tanto en grandes proyectos de infraestructura económica como en proyectos municipales asociados a transporte, alumbrado público y agua, entre otros servicio.
OR