En la noche del pasado viernes 6 de octubre los mexicanos presenciamos un sismo de 6.0 con epicentro en Oaxaca, y como ocurre después de un sismo “un bolillo pa’l susto” parece necesario, pues nos ayuda a reducir la acidez estomacal o la sensación de vacío en nuestro estómago causada por el estrés.
Consumir “un bolillo pa’l susto” es un remedio que escuchamos frecuentemente de las abuelas, sin embargo, también está avalado por la ciencia.
Un bolillo puede ayudar a recuperarnos después de un susto, un momento de pánico, una mala noticia y un momento de mucho estrés, ya que “por su cantidad de carbohidratos, este alimento inhibe la secreción de ácidos y nos ayuda a reponernos de un susto. Además, por ser masudo y tener la corteza dura, nos obliga a masticar, lo cual nos distrae y aminora nuestros miedos”, explicó Nayeli Xochiquetzal Ortiz Olvera, profesora de la Facultad de Medicina de la UNAM.
Asimismo, la profesora aseguró que el mito que dice que la diabetes se origina después de un susto es falso.
“Es mentira. Si alguien descubre que la padece tras haber vivido momentos de estrés, es porque desde antes ya tenía un antecedente. Por ello, tras un sobresalto, los diabéticos pueden comer un pedazo de bolillo sin problema alguno, pues eso les ayuda a estabilizar el azúcar y a no marearse”.
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Por otro lado, Eduardo Calixto González, profesor de la Facultad de Psicología de la UNAM, aseguró que cualquier otro alimento, además del bolillo puede funcionar, tal como la fruta, la fibra y los lácteos. Cabe destacar que el bolillo se convirtió en el producto principal que ayuda a calmarnos por ser económico y estar presente la mayoría de las veces en los hogares mexicanos.
Para terminar, Calixto González también añadió que “abrazar a las personas genera certidumbre; tener la sensación de que vamos a estar bien y en compañía es mucho más fuerte y fisiológicamente estable que un pan, porque hace que el cerebro libere más oxitocina, la hormona del amor y el apego. Por lo tanto, un beso o un abrazo nos ayuda a atravesar las situaciones más difíciles. Eso no cambia la realidad, pero hace que nos recuperemos más rápido”.
DRS