Al presidente Andrés Manuel López Obrador le quedan 342 días para cumplir su promesa de instaurar un sistema de salud como en Dinamarca…pero los servicios en ese sector, como consultas e intervenciones quirúrgicas, han tenido un desplome en lo que va del sexenio.
La realización de intervenciones quirúrgicas en hospitales públicos ha caído 21% durante el Gobierno de la autoproclamada Cuarta Transformación, en comparación con el sexenio pasado.
De acuerdo con los anexos del Quinto Informe de Gobierno, en cinco años de la administración de Enrique Peña Nieto (2013-2017) se practicaron 18 mil 507 operaciones.
Mientras que entre 2019 y hasta junio pasado van 14 mil 613 intervenciones en el IMSS, Issste, IMSS-Bienestar, hospitales estatales, de Pemex, así como de las Fuerzas Armadas.
Los datos resaltan que, en 2020, año de mayor incidencia de la pandemia de Covid-19, solo se practicaron 2 mil 75 operaciones, la cifra más baja desde el sexenio de Vicente Fox, en 2005, cuando se realizaron 3 mil 158 operaciones quirúrgicas.
A su vez, el año pasado se realizaron 3 mil 357 intervenciones en hospitales públicos, los cuales ya operaron de manera normal y a toda su capacidad.
Según la revisión de 24 HORAS, en el sexenio de López Obrador las consultas médicas de urgencia descendieron 29.8%, al pasar de 265 mil 419 en los cinco primeros años del sexenio de Peña Nieto, a 186 mil 216 servicios de ese tipo.
Respecto a las atenciones con médicos de especialidades, en los hospitales públicos, entre 2019 y junio pasado, en la autoproclamada Cuarta Transformación, se realizaron 171 mil 880 consultas, lo que significa una baja de 31.5% respecto al mismo periodo del pasado sexenio, cuando fueron 250 mil 924.
Los anexos del Quinto Informe contienen datos de que las consultas generales descendieron 29.7%, debido que entre 2013 y 2017 se registraron más de 1.1 millones de ese tipo de servicios, mientras que desde 2019 van poco más de 775 mil.
A su vez, las consultas externas, que se refieren a las agendadas previamente para atención y seguimiento de padecimiento, se desplomaron 30% durante el actual sexenio, al pasar de 1.6 a 1.1 millones en un lapso comparativo de cinco años.
El sistema de salud, con medicinas y atención gratuita, se estableció en el compromiso 13 de las primeras 100 promesas de López Obrador, y aunque a la fecha la Presidencia de la República lo considera como cumplido, el propio mandatario ha reconocido que es uno de los pendientes
Esto con el argumento de que la atención de la pandemia fue la prioridad de los últimos años.
“A más tardar a finales (diciembre del año pasado) ya tendremos un sistema de salud pública como el de Dinamarca, y puede ser que mejor, donde la atención médica, los medicamentos son gratuitos. En Dinamarca tienen políticas que eran completamente inalcanzables en México, porque no hay corrupción, como lo que había en México”, aseveró a finales de 2022.
Una de las últimas referencias a ese tema fue en la conferencia matutina del 26 de septiembre pasado, en la que señaló que su Gobierno heredaría un sistema de Salud mejor que el de Dinamarca.
“Es un compromiso, un desafío. Tenemos ya como meta, marzo del año próximo”.
Pese a los compromisos y ultimátums presidenciales, las propias estadísticas de su Administración, contenidas en el Quinto Informe de Gobierno, señalan el desplome en los servicios de Salud, tanto en hospitales federales como locales, que se han dado en un contexto de cambios en el sector.
El sexenio de López Obrador arrancó con la operación del Seguro Popular, pero la Cuarta Transformación decidió eliminarlo para dar paso al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), cuya operación estuvo vigente entre el 1 de enero de 2020 hasta el pasado 30 de mayo, cuando se extinguió.
Durante parte del sexenio también estuvo vigente la emergencia sanitaria por la pandemia de Covid-19, lo que obligó a las autoridades sanitarias a cancelar los servicios ordinarios de consultas y reconvertir hospitales para atender a la población.
Actualmente opera el sistema IMSS-Bienestar, con lo que se busca federalizar los sistemas de Salud; a la fecha, 23 estados, todos gobernados por Morena y aliados, aceptaron ese sistema, que atenderá a 53.2 millones de personas sin ningún tipo de cobertura de Seguridad Social, con lo que se convertirá en el sistema de salud pública más grande del planeta.
Con ese sistema y una carga de desplome en los principales servicios de Salud, el Presidente buscará que a finales de septiembre de 2024, cuando culmina su mandato, México cuente con servicios como en los países nórdicos; es decir, medicinas sin desabasto y atención gratuita, entre otros.