El diputado perredista Martí Batres presentó ante el pleno la iniciativa de reforma a la Ley Orgánica del Congreso de la Unión en la que se propone que a quienes conforman ese órgano se les pague la dieta según el cumplimiento de su encargo.

 

En el documento se plantea reducir 30 por ciento la dieta de los legisladores que incumplan con sus funciones e incluso sean revocados de su cargo por inasistencia a las reuniones y sesiones legislativas.

 

Se sugieren dos figuras para sancionar a los legisladores federales: la de revocación de mandato, equivalente a un contrato a prueba, y la de pago por trabajo en sesiones, que es el pago por hora.

 

El legislador perredista subrayó que “ahí veremos la congruencia. Si se aplican medidas muy duras para los trabajadores, pues mínimamente diputadas y diputados tendrán que aplicárselos a sí mismos”.

 

Expuso que la dieta deberá calcularse sobre la base del cumplimiento de las y los diputados en las sesiones plenarias, para lo cual se deberá cambiar la lógica de las reglas del órgano legislativo.

 

En cuanto a la revocación de mandato se presenta de tal forma que la población que eligió a los legisladores tenga facultad para removerlos en caso de que no cumplan y no se tenga que esperar a que culminen su mandato.

 

Batres Guadarrama refirió que mientras en la Ley Orgánica y el reglamento de la Cámara de Diputados se establece descontar a los representantes populares por inasistencia, de proceder su propuesta se les pagaría, más bien, por asistir a cumplir con su obligación.

 

En la iniciativa de reforma a los artículos 64 y 73 de la Constitución Política y 77 y 78 del Reglamento de la Cámara de Diputados se plantea que los diputados y senadores que falten a una sesión sin causa justificada o permiso de la cámara respectiva, no tendrán derecho a la dieta correspondiente al día en que falten.