Si algo había caracterizado a Xóchitl Gálvez eran sus reflejos para responder a mentiras, burlas, indirectas y descalificaciones.
Esa característica que le sumó miles de simpatizantes ya no es lo que fue y para ejemplo su mensaje criticando un aumento de precio de la gasolina que solo ocurrió en el papel de un periódico.
Gálvez debe entender que es la candidata presidencial de la oposición y que cada mensaje en redes sociales debe ser triplemente verificado para que no se comprometa su credibilidad.
¿Quién de su equipo fue el responsable de llevarle la noticia del “incremento’’ del precio de las gasolinas sin verificar que ello fuera cierto? ¿Acaso hicieron un elemental recorrido por las gasolineras de la colonia en donde viven para comprobar la información?
Desde luego que no lo hicieron y con ello, lo único que lograron, fue una campaña brutal en redes acusándola de mentirosa.
A este gobierno se le pueden cuestionar muchas mentiras, pero lo de ayer fue una volada que se llevó entre las patas la credibilidad de varios comunicadores.
Xóchitl no puede permitirse ese tipo de errores, ya no.
Ella y su equipo deberán entender que representa a millones de mexicanos que la ven como la opción de un cambio del sistema político.
El tiempo para su curva de aprendizaje concluyó hace semanas; sus asesores, que se supone saben de tiempos y contratiempos, deben también hacerse oír y orientar los criterios de la candidata presidencial, por impetuosa que ésta sea.
Cada día que se posiciona en redes con campañas en contra es un día perdido para su causa y la de millones de mexicanos.
Por eso preocupa que a estas alturas del proceso electoral cometa errores como el de ayer que la exhiben por lo menos como desconocedora de un tema como el mercado de las gasolinas.
Ya no hay tiempo para aprender ni para experimentos.
Y si sus asesores no la entienden o no se entienden entre ellos, que renuncien.
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El licenciado y tres veces doctor (quién sabe en qué), Samuel García, se pasó por salva sea la parte la Constitución Federal y la local para modificar, por sus pistolas, el presupuesto de Nuevo León para este 2024.
Sucede que el gobernador berrinches envió al Congreso el mismo presupuesto que se aplicó en el 2023, pero con la eliminación de un anexo en el que se contempla una partida de 2,500 millones de pesos para los municipios.
Se supone que es abogado y que conoce que solo el Congreso tiene facultades para modificar el presupuesto.
Pero como sigue en su pleito de vecindad con los legisladores locales del PRI y el PAN, cree que apretando a los municipios con la desaparición de esa partida los va a doblar para que acepten su voluntad.
Está equivocado y lo único que logró fue exacerbar la pugna que terminará seguramente en la Suprema Corte de Justicia, donde García va a volver a perder.
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Ayer se realizó un operativo conjunto entre la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Oaxaca, la Policía Estatal de la misma entidad y la Guardia Nacional para cumplimentar una aprehensión en contra de Humberto “N’’.
El sujeto fue detenido y presentado ante las autoridades por el delito de asociación delictuosa; ha sido señalado como uno de los responsables del secuestro de la planta de cemento Cruz Azul en Hidalgo y de la venta de cemento robado a través de factureras.
@adriantrejo