PARÍS. El secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), José Ángel Gurría dejó en claro que México no puede seguir esperando las reformas estructurales.

 

Durante el seminario con expertos en política social, el también ex secretario de Hacienda aseguró que Enrique Peña Nieto llega a la Presidencia de la República con respaldo social, con un mandato sólido al obtener más de 3 millones de votos de diferencia con su más  cercano adversario en los comicios pasados y “con un importante apoyo en el Congreso” para concretar los cambios que el país requiere.

 

Dijo que si bien el político mexiquense no cuenta con una mayoría absoluta en el Congreso, “sí cuenta con un margen razonable para promover reformas claves, reformas que han tenido que esperar muchos años precisamente por la falta de consensos políticos. Esa es una gran noticia porque México no puede seguir esperando”.

 

Reconoció que el adecuado manejo de los factores económicos y sociales llevará a México a crecer a ritmos más acelerados y a reducir la desigualdad entre su población.

 

El funcionario de la OCDE destacó que Mèxico tiene más de 115 millones de personas, una macroeconomía estable, finanzas públicas sanas, bancos bien capitalizados y regulados, con gran capacidad de trabajo.

 

“La conjugación adecuada, bien orientada y la secuencias de estos factores puede llevar a nuestro país a crecer a ritmos más acelerados y sobretodo de manera sostenido y a reducir las grandes desigualdades que tanto le afectan”, sostuvo.

 

Sin embargo, sostuvo que México sólo podrá aprovechar sus fortalezas y potencialidades si enfrenta con éxito sus desafíos estructurales: su educación, su competitividad, su productividad, su estado de derecho.