La alineación entre los indicadores de incidencia delictiva y percepción de seguridad requiere del acompañamiento ciudadano, de lo contrario pueden pasar varios años antes de revertir la sensación de riesgo.

A Inglaterra, el país donde surgió el primer cuerpo policial en 1829 —creado por el Ministro del Interior, Sir Robert Peel, y a cuyos elementos los conocieron como Bobbies o Peelers— le llevó 24 años, de 1995 a 2019, mejorar en 15 puntos porcentuales la percepción de seguridad.

En contraste, y como referencia a un esquema de integración ciudadana, en la Ciudad de México, la sensación mejoró 33 puntos en casi cinco años. Una velocidad al triple de lo ocurrido con los ingleses.

¿Cuáles fueron los elementos diferenciadores o aceleradores?

En diciembre de 2018, al asumir la jefatura de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, ahora presidenta electa de la República, fue particularmente sensible al entender el tema de la ciudadanía como algo superior e integrar a organismos de la sociedad civil en la generación de insumos relacionados con la seguridad.

El modelo de la capital nacional gobernada por Martí Batres encuentra oportunidades de réplica en otras entidades interesadas en replantear los esquemas tradicionales de combate al delito y hacer partícipe a la ciudadanía, como también lo ha asumido la jefa de Gobierno electa, Clara Brugada.

Zacatecas cuenta con un esquema de construcción de paz impulsado por el gobernador David Monreal, el cual arroja resultados en los datos duros. De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en el periodo enero-mayo de este año, los delitos de alto impacto bajaron 17 por ciento respecto al mismo lapso de 2019.

Con 152 homicidios dolosos en cinco meses, la entidad tiene seis veces menos con relación a su vecina Guanajuato, que lidera el delito con mil 016.

Una disminución aún no reflejada en la percepción. Según la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del Inegi, del primer trimestre de este año, Fresnillo y Zacatecas ocupan el primer y tercer sitio en sensación de inseguridad, con 95.4 y 89.3 por ciento, respectivamente.

Hay una inercia positiva a disminuir la incidencia delictiva, falta reflejarlo en percepción. El trabajo conjunto de sociedad civil, iglesias, familias, autoridades estatales y municipales, así como las fuerzas políticas, es fundamental.

El acercamiento con organismos civiles como el Consejo Ciudadano de la CDMX, que este martes estableció un convenio de colaboración con la Fiscalía General de Justicia de Zacatecas, dirigida por Cristian Paul Camacho Osnaya, contribuye a la generación de datos esenciales sobre lo que ocurre en los territorios y en los espacios familiares.

La ciudadanía es una mina de información mayor que la de Zacatecas en sus tiempos coloniales.

 

      @guerrerochipres