Histórico. Ambos fueron detenidos en El Paso, Texas, lo que para Estados Unidos es un golpe “al corazón” del Cártel de Sinaloa
Foto: Especial | Histórico. Ambos fueron detenidos en El Paso, Texas, lo que para Estados Unidos es un golpe “al corazón” del Cártel de Sinaloa  

“Un día decido entregarme al gobierno para que me fusile… Pero al cabo de los días vamos sabiendo que nada cambió”, dijo Ismael El Mayo Zambada al finado periodista Julio Scherer García, en una entrevista publicada por Proceso en 2010.

Fue ayer cuando finalmente el capo se entregó, pero no al Gobierno de México, sino al de Estados Unidos, dejando en el aire la recompensa de 15 millones de dólares que se pedía por su cabeza.

Con él se entregó Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, preso en Estados Unidos desde 2017.

Ambos llegaron en pleno día a un aeropuerto de El Paso Texas, a bordo de un avión Beechcraft King Air 250, una aeronave para siete pasajeros de asientos cómodos, mesas retráctiles y frigobar.

Poco después, conforme avanzó la tarde de este jueves, el rumor de la detención de ambos capos, líderes del Cártel de Sinaloa, se convirtió en clara certeza con la confirmación oficial del Gobierno de Estados Unidos, de su captura por parte del FBI (Buró Federal de Investigación) y la DEA (Administración de Control de Drogas, por sus siglas en inglés).

“El Departamento de Justicia ha detenido a dos presuntos líderes adicionales del Cártel de Sinaloa, una de las organizaciones del narcotráfico más violentas y poderosas del mundo. Ismael Zambada García, o El Mayo, cofundador del cártel, y Joaquín Guzmán López, hijo de su otro cofundador, fueron arrestados hoy en El Paso, Texas”, informó el fiscal general de Estados Unidos, Merrick B. Garland, en un comunicado.

Ambos líderes del Cártel de Sinaloa enfrentan múltiples cargos por liderar las operaciones criminales del cartel, incluidas sus redes de fabricación y tráfico de fentanilo, uno de los principales flagelos en materia de drogas en Estados Unidos, donde ha causado miles de muertes por sobredosis.

El Mayo y Guzmán López se unen a una lista cada vez mayor de líderes y asociados del Cártel de Sinaloa a quienes el Departamento de Justicia ha detenido; eso incluye al otro cofundador del cártel, Joaquín Guzmán Loera, o El Chapo; otro de los hijos de El Chapo y presunto líder del cártel, Ovidio Guzmán López; y el presunto sicario líder del cártel, Néstor Isidro Pérez Salas, o El Nini”.

Sobre Ovidio, en el Buró Federal de Prisiones de EU, el preso registrado con el número 72884-748 aparecía ayer con el estatus de “liberado” desde el 23 de julio pasado, es decir, dos días antes de que El Mayo se entregara junto con su hermano.

Este registro no necesariamente indica que ya no se encuentra libre de cargos en Estados Unidos, pues puede seguir en libertad condicional, supervisada o bajo la custodia de algún otro sistema de justicia penal, por ejemplo, en una prisión estatal… Esto puede indicar algún tipo de negociación, con el objetivo de evitar el estricto régimen disciplinario de una prisión federal.

De hecho, Ovidio Guzmán, alías El Ratón, tiene programada una audiencia el próximo 30 de septiembre en Chicago, donde radica el caso en su contra, la cual hasta ayer no se había suspendido.

 

Importancia

Por la noche, Anne Milgram, titular de la DEA, informó sobre la detención de ambos capos, resaltando la importancia de su captura para el combate al narcotráfico.

“El arresto de Ismael Zambada García, mejor conocido como El Mayo… golpea el corazón del cártel que es responsable de la mayoría de las drogas, incluido el fentanilo y la metanfetamina, que matan a estadounidenses de costa a costa. El Mayo es uno de los fugitivos más buscados por la DEA y está bajo custodia esta noche y pronto enfrentará la justicia en un tribunal de justicia de Estados Unidos”, afirmó.

Mientras que sobre Joaquín Guzmán López, afirmó que “su arresto es otro golpe enorme para el Cártel de Sinaloa. En 2017, él y sus hermanos, Los Chapitos, supuestamente tomaron el control del cártel después de que El Chapo fuera extraditado a los Estados Unidos”.

 

Análisis

Sobre la detención de los cabecillas del Cártel de Sinaloa, especialistas consideraron que su entrega se habría pactado con autoridades de Estados Unidos, sin la intervención del Gobierno de México.

Para el doctor Francisco Quintero, consultor en Inteligencia y Seguridad, una entrega pactada vulneraría la soberanía de México, donde el narcotráfico y la lucha entre y contra los cárteles también ha dejado miles de muertos.

También señaló que en la estructura de organizaciones como el Cártel de Sinaloa ya no operan con una sola cabeza, sino con distintos liderazgos.

Rubén Ortega, miembro del Observatorio de Seguridad y Justicia de la Universidad de Guadalajara, señaló que pese a esta entrega, el cártel continuará sus operaciones, pues aunque quedó “aparentemente sin cabezas”, los capos ya habrían dejado detrás a sus sucesores.

Señaló que El Mayo y Joaquín Guzmán se acogerían en EU a la figura de colaboradores, dando información sobre aquellos que se han beneficiado del cártel, más allá de sus integrantes.
José Reveles, experto en temas de seguridad, afirmó que habrá una lucha encarnizada por tomar el poder en Sinaloa, y las autoridades tendrán que estar atentas a esto.

Afirmó que ese cártel sigue siendo la principal organización de trasiego de drogas en el mundo, pero le está siguiendo los pasos muy de cerca el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Reveles no descartó que en lugar de una entrega pactada, agentes estadounidenses le hayan tendido una trampa o incluso hubieran incursionado a México, rompiendo todas las leyes, para evitarse los trámites de extradición.

José Andrés Sumano, integrante del Laboratorio de Estudios sobre Violencia en Fronteras, resaltó que uno de los motivos para la entrega pactada de El Mayo sería porque este ya carga con varios problemas de salud, además de varios problemas con el grupo de Los Chapitos.

Con respecto al relevo en el mando del cártel, Sumano indica que podría haber un aumento de la violencia por la sucesión, porque La Vieja Guardia y Los Menores podrían librar disputas internas.

“Podemos esperar algo de violencia entre estos grupos y, sin duda, el grupo rival, el de los Menores buscará sacar ventaja del desorden por la sucesión”.

El doctor José Sumano también consideró que “una detención de este tamaño le puede dar un buen impulso a la candidatura demócrata. Es decir, es una detención en el momento justo, para impulsar la candidatura de Kamala Harris (vicepresidenta de EU y aspirante demócrata a la Presidencia), creo que así la podemos leer (…) considero que esta captura se hizo a espaldas del Gobierno de México”.

 

Al cierre de esta edición, autoridades del Gobierno de México no se habían pronunciado abiertamente sobre la detención de ambos capos.

Al final, con el reacomodo al interior del Cártel de Sinaloa, las palabras que El Mayo le dijo a Scherer en 2010 terminarán cumpliendose: “al cabo de los días vamos sabiendo que nada cambió”.

 

DESTACADO

Hidra de cien cabezas

Especialistas coinciden que el Cártel de Sinaloa opera como una “sombrilla”, es decir, su estructura recae en varios cabecillas, siendo estos Los Chapitos: Iván y Alfredo Guzmán Salazar, y Joaquín y Ovidio Guzmán López, estos últimos actualmente bajo custodia estadounidense.

Así como el grupo de Aureliano El Guano, Aureliano Guzmán Loera, hermano de El Chapo; el grupo de Rafael Quintero, y la gente leal a Ismael El Mayo Zambada, también bajo custodia.

El último de la vieja escuela 

 

Ismael El Mayo Zambada es uno de los últimos capos de la vieja escuela, siendo líder del narcotráfico por casi 40 años sin ser detenido. 

Al inicio de la década de los 80 formó parte del Cártel de Guadalajara, pero al desintegrarse, junto a El Chapo Guzmán y Caro Quintero fundó el Cártel de Sinaloa. 

De perfil bajo, son escasas las fotografías que hay de él y la más difundida es la de 2010 con el periodista Julio Scherer. De acuerdo a la DEA, tras la detención de Joaquín Guzmán, el Cártel de Sinaloa se dividió y El Mayo quedó al frente de una escisión. 

Previo a su captura se encontraba dentro de la lista de los más buscados de la DEA. /Ángel Cabrera