Más de 228 millones de pesos dejaron de ingresar a las arcas del municipio de Benito Juárez, en Quintana Roo, entre 2021 y julio de 2024 al dejar de implementar el alcoholímetro, esto con base en el promedio de detenidos durante los últimos seis meses en el que se aplicó la medida, que era de 360 personas por mes.
El director de los Juzgados Cívicos de la alcaldía, Máximo Martínez Canché, dijo que los operativos se instalaban cuatro días de la semana, de jueves a domingo, y el promedio por semana era de hasta 90 remitidos al Centro de Retención Municipal, El Torito.
La multa por conducir bajo los efectos del alcohol es de 150 Unidades de Medida y Actualización (UMA), cuyo valor el día miércoles 14 de agosto era de 108.57 pesos, por lo que la penalidad en este año es de 16 mil 285.5 pesos y para la cual no hay descuento.
El recurso obtenido del cobro de las sanciones impuestas por el Juez Cívico ingresa a las cuentas del ayuntamiento y es destinado para labor social, mantenimiento, obra pública, servicios, compra de vehículos y equipamiento que se requiera, esto con base en lo establecido en la Ley municipal.
POSIBLES DESTINOS
Con los millones que no se recaudaron se pudieron comprar seis máquinas para pavimentar las calles, ya que cada una tiene un costo en el mercado de 35 millones de pesos; también se podrían haber adquirido 10 mil 260 balísticos cómo los que entregó la gobernadora Mara Lezama el pasado julio, ya que por 507 chalecos se gastó el Gobierno más de 11 millones de pesos.
Con base en el cálculo realizado por 24 HORAS Quintana Roo, si el promedio de detenidos era de 90 por semana; 360 por mes y 4 mil 320 por año, en este 2024 de enero a julio hubieran sido en promedio 2 mil 520 enviados a El Torito.
Por lo anterior, al ser la multa de 16 mil 285.5 pesos y 2 mil 520 conductores que hubieran sido retenidos en siete meses, en este año hubieran entrado a las arcas del ayuntamiento de Benito Juárez, sólo por el alcoholímetro, 41 millones 39 mil 460 pesos hasta el momento.
La última vez que se implementó el programa en Benito Juárez fue en marzo del 2020, y se suspendió debido a la pandemia por el Covid-19.