El Fondo Monetario Internacional (FMI) revisó a la baja su perspectiva de crecimiento para México al ubicarlo en 1.5% en 2024, y 1.3%, en 2025, mientras que para Estados Unidos la proyección fue al alza al estimar un crecimiento de 2.8%.
Al reportar que la economía mundial crecerá 3.2% este año y el que viene, predijo ayer, que opta por la prudencia en sus previsiones debido a la desaceleración en países emergentes como México, China y Rusia.
Con motivo de la publicación de su informe anual sobre la economía mundial (WEO, por sus siglas en inglés), el FMI expresó su preocupación por el aumento de la incertidumbre a nivel mundial, debido a la multiplicación de los riesgos tanto geopolíticos como económicos, en particular la flojera económica registrada en China.
En el caso de México, se estimó una inflación anual de 4.7% muy por arriba de la meta planteada del 3% y para el siguiente año la estimó en 3.8%, con un déficit en cuenta corriente que se puede elevar hasta el 0.7% del PIB el presente año y 0.9% en 2025, mientras que el desempleo se elevará de 2.2% a 3.3%.
El banco destacó a pesar del panorama la resiliencia de la economía mundial, debido a la pandemia por Covid-19, el estallido de conflictos geopolíticos y fenómenos meteorológicos extremos que han interrumpido la cadena de suministro.
“La economía mundial ha demostrado resiliencia en general, pero esto oculta un desempeño desigual entre regiones y fragilidades persistentes”, advirtió .
Actividad económica desacelera
El Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) registró una contracción durante agosto de 2024 de 0.31%, cuando disminuyó 0.66%. Con esto, el IGAE registró una tasa de crecimiento anual de 1.03%, que es la menor desde abril del 2024, cuando se tuvo una tasa anual de 0.87%.
Además, la tasa representa una desaceleración considerable comparada con el crecimiento de 1.99% registrado el mes anterior.
La disminución mensual del IGAE se debió principalmente al retroceso de las actividades primarias, con una caída de 9.06%, y de las actividades secundarias, que cayeron 0.48%.
Dentro de las actividades secundarias, destaca el sector de la construcción, que se contrajo 3.66%, siendo esta su mayor caída desde septiembre del 2023.
Alejandro Saldaña, analista financiero de Bx+, registró que no se encontraron catalizadores que permitan una aceleración significativa en el crecimiento económico en lo que resta del año.
Destacó que el consumo privado todavía encontrará apoyo en la solidez del empleo y el crecimiento en salarios. No obstante, prevemos una moderación adicional en el gasto más discrecional, si la generación de empleo muestra menor fuerza, y la inflación y las tasas de interés – aunque disminuirían algo más – permanecen elevadas.
“Por su parte, la inversión privada enfrenta costos financieros todavía elevados, y una creciente incertidumbre asociada a las reformas constitucionales en el país y a la próxima elección presidencial en EU”.
La exportación continuaría exhibiendo atonía en el corto plazo, pues los indicadores oportunos de industria estadounidense (ISM manufacturero) se mantienen en terreno contractivo.
“Dado lo señalado arriba y que la economía mexicana ha presentado una modesta expansión en lo que va del año, recientemente redujimos la perspectiva del Producto Interno Bruto durante 2024 a 1.3%”, explicó Alejandro Saldaña.
En tanto, Víctor Ceja, economista en jefe de Valmex, destacó que el incremento durante los primeros ocho meses del año en el país se asocia con el buen desempeño del sector servicios, impulsado por los servicios profesionales.
“En cambio, los decrementos en servicios de esparcimiento y minería restaron dinamismo a la actividad económica”.
Agregó que de cumplirse las expectativas del IOAE y el IGAE, el crecimiento en los primeros nueve meses del año sería de 1.6%. “Hacia delante… se podría observar menor dinamismo en la economía”, dijo.