Este fin de semana, autoridades de Guanajuato confirmaron el ataque armado a un anexo irregular de San Miguel de Allende, donde tres personas perdieron la vida; en lo que va del año, suman ocho los internos asesinados en estos centros en la entidad.
Cerca de las 19:00 de este sábado, vecinos se alertaron por las detonaciones y reportaron la emergencia al 911.
El Gobierno municipal y la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) confirmaron que el supuesto espacio de rehabilitación no cuenta con los permisos necesarios para su operación, por ninguna de las autoridades competentes.
Hasta el momento se desconoce si hay detenidos o el destino del anexo.
Este es el segundo ataque que se registra en el estado en menos de un mes. Apenas el 2 de octubre pasado en la colonia El Rosario, del municipio de Salamanca, una agresión a balazos en un anexo dejó cinco ejecutados y cuatro lesionados.
En el inmueble habilitado como anexo, se encontraban unas 30 personas entre padrinos, encargados e internos, cuando hombres armados ingresaron al estacionamiento y comenzaron a disparar.
Gabriel Cortés Alcalá, titular de Salud de Guanajuato, reconoció que hay 150 centros de este tipo en el estado, y que su regularización se ha logrado porque cambian de domicilio cuando son identificados por las autoridades, publicó el Sol del Bajío.
De 2020 a la fecha, en Guanajuato han ocurrido tres masacres en contra anexos, la más fue en Irapuato en ese año, cuando un ataque a Recuperando mi Vida dejó 27 jóvenes muertos, quienes se encontraban internos.