Decenas de miles de personas salieron de nuevo a las calles de Valencia para protestar contra la gestión que las autoridades españolas han realizado por las inundaciones ocurridas en octubre por el paso de la DANA y que dejaron 230 fallecidos.
Con gritos de “no son muertes, son asesinatos” y una enorme pancarta en la que se leía “Mazón, dimisión”, referente al presidente regional valenciano, Carlos Mazón, un aproximado de 100 mil personas abarrotaron la zona centro de la ciudad, informó la Delegación del Gobierno en Valencia.
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Esta sería la segunda marcha masiva que se da debido al descontento de los valencianos en la que “Tu negligencia es nuestra desgracia” o “solo el pueblo salva al pueblo” eran algunos de los lemas que se leían.
La manifestación anterior contó con la participación de 130 mil personas.
Afectados por las riadas que cobraron la vida de más de 200 valencianos, expresaron su enojo ante lo que catalogaron como incompetencia por parte de las autoridades.
“¿Qué falló? Incompetencia. Por eso estamos aquí, porque hay mucho incompetente al que se le está pagando el sueldo”, afirmó una profesora de 55 años radicada en Paiporta de nombre Raquel Ferrandis, quien sostenía una pancarta en honor de la madre fallecida de una de sus amigas.
Maribel Peralta, otra profesora de Valencia dijo sentirse “indignada” por lo ocurrido mientras sostenía una pancarta en contra del presidente regional, principal señalado por la falta de acción para alertar a los habitantes de la tragedia y el mal manejo posterior a las inundaciones.
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“La gente que lo ha perdido todo, a ver cómo vive. La gente que ha perdido el negocio, a ver cómo vive. Las ayudas no llegan”, agregó.
Los reclamos durante las manifestaciones, que resalta transcurrieron de forma pacífica, no han sido solo para el gobierno local, el presidente español, Pedro Sánchez también ha sido duramente criticado por la falta de contundencia en la atención de la contingencia.
¿Qué pasó en Valencia?
El pasado 29 de octubre un fenómeno meteorológico denominado como DANA provocó un violento torrente de agua que desbordó en varias localidad de Valencia, destruyendo a su paso viviendas, negocios y autos, y dejando una estela de muerte.
Los estragos continúan incluso un mes después de la tragedia, cuya magnitud, de acuerdo con los manifestantes, pudo haber sido mucho menor de haberlos alertado a tiempo.