Como parte del proceso de afiliación y reafiliación que está haciendo Morena, los senadores que obtuvieron su nueva credencial, firmaron un Decálogo en el que se comprometen a actuar con austeridad, a no ser corruptos y a establecer una línea divisoria con el crimen organizado.
“En ningún caso la policía se utiliza para reprimir al pueblo y hay una línea divisoria con el crimen organizado, el poder se ejerce con humildad y no hay espacio para banalidades”, señalan los puntos 9 y 10 del decálogo.
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Y establece que, “la corrupción no se tolera y se cuenta con mecanismos eficaces para evitarla y castigarla. No hay cabida al nepotismo, amiguismo, influyentismo, sectarismo ni a los aviadores”.
El documento que debe ser firmado para poder obtener su credencial, señala que los servidores públicos de Morena se deben al pueblo y deben ser leales a él, por lo que deben atender sus reclamos en audiencias públicas semanales.
“Se cuenta con un Plan de Austeridad Republicana, que incluye erradicar privilegios de las y los funcionarios. Ningún funcionario gana más que la Presidenta de México”, señala.
Además, señala que como demócratas, “Cuando existe duda, conflicto o alguna decisión difícil, se consulta al pueblo. Se informa de manera periódica y con absoluta transparencia el destino de los recursos públicos”.
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Les pide tener paridad en los equipos de gobierno y dar prioridad a las juventudes. Sobre el uso de los recursos públicos, “la inversión pública en infraestructura y programas, siempre están enfocados en las y los que menos tienen”.
Y aclara que “los servicios públicos se fortalecen y mejoran, no se privatizan. Se respeta la naturaleza. Las reservas naturales por encima de intereses privados”.