El candidato republicano a la Presidencia de Estados Unidos, Mitt Romney, hizo hoy su penúltima parada en Ohio, considerado “el más clave de los estados clave”, donde arremetió contra su rival demócrata, el presidente Barack Obama, a quien acusó de “dividir la nación”.

 

“Obama prometió muchísimo, pero francamente ha conseguido muy poco. Prometió trabajar con ambos partidos, pero ha sido atacante, ha dividido el país. (…) Ha ignorado al Congreso en vez de trabajar con él”, insistió el republicano.

 

A  dos días para las elecciones estadunidenses, los dos candidatos están consumiendo sus últimos cartuchos en aquellos estados más disputados, como Virginia, Iowa, Florida o Nuevo Hampshire, pero según coinciden los expertos, Ohio es la batalla más importante.

 

Romney alentó a los seguidores reunidos en la localidad de Cleveland a votar por “el cambio”, consigna estrella en sus discursos durante estos últimos días de campaña, y aseguró que su voto republicano revela su preocupación por Estados Unidos.

 

“Ustedes están aquí porque están preocupados por Estados Unidos, y espero que estén todos aquí para celebrar la victoria del martes. (…) El cambio no se mide en palabras, sino en logros. Y eso es lo que haremos Paul Ryan y yo”, dijo ante miles de asistentes en una de las ciudades más populosas del estado.

 

El candidato republicano insistió en “las promesas rotas” del presidente estadounidense, y cargó contra sus políticas de las que señaló “casi todas han sido dañinas para la economía”.

 

“Dijo que iba a reducir el déficit, y se ha duplicado; que iba a trabajar para crear trabajos; y se dedicó a sacar adelante el Obamacare (reforma sanitaria) que sólo los ha eliminado”, subrayó.

 

Romney no dejó escapar el reciente dato del desempleo, que situó la tasa a escala nacional el pasado viernes en un 7,9 %, una décima más que el dato anterior.

 

“El desempleo es mayor que cuando Obama llegó a la presidencia. Dijo que lo reduciría al 5,2 % y estamos en el 7,9 %. (…) La respuesta para este país son los empleos, y en eso trabajaré cuando sea elegido”, prometió el republicano en uno de los estados más afectados por la crisis económica debido a su alto tejido industrial.

 

Romney volvió a citar su intención de aprovechar el comercio exterior con Latinoamérica e insistir en que eliminará todas las medidas de la Administración demócrata que hayan perjudicado al crecimiento económico.

 

“Voy a eliminar todas las medidas que ha tomado Obama y que están matando empleos, y por primera vez los pequeños emprendedores sabrán que su presidente se preocupa sobre lo que ellos están haciendo”, dijo asumiendo su victoria el próximo martes.

 

Obama también visitará hoy Ohio y visitará su capital, Cincinnati, después de pasar por Concord (Nuevo Hampshire) y Fort Lauderdale (Florida), y antes de hacer escala en Aurora (Colorado).

 

Por su parte, Romney viajó por la mañana a Des Moines (Iowa), y después de Cleveland se desplazará a Morrisville (Pensilvania) y a Newport News (Virginia).

 

Según una encuesta de la cadena CNN divulgada el viernes, Obama supera en Ohio a Romney por apenas tres puntos (50 a 47 %), una ventaja que está dentro del margen de error del sondeo y explica por qué hoy la consigna en todos los canales de televisión es “Ohio, Ohio y Ohio”.

 

En este estado han votado por anticipado 1,6 millones de personas, de los cuales el 29 por ciento está registrado como demócrata y el 23 por ciento como republicano, mientras que el resto no estaba afiliado a ninguno de los dos.

 

El cómputo que realiza regularmente el prestigioso centro de análisis independiente RealClearPolitics revela que Obama y Romney se encuentran ahora empatados en el favor popular a nivel nacional, con 47,4 % de apoyo para el primero y un 47,3 % para el segundo.

 

Mañana ambos candidatos harán su sprint final por otro puñado de estados que marcarán el resultado electoral, pero solo coincidirán en una ciudad para el cierre de su campaña: Columbus.