“Acabo de pasar la caseta de Monterrey, voy derecho hacia Nuevo Laredo…”

 

Ese mensaje en su perfil de Facebook fue la última señal de vida que dio Alejandro Alfonso Moreno Baca, de 34 años de edad, ingeniero en sistemas que trabajaba para la compañía estadunidense IBM. Desapareció desde el 27 de enero de 2011 en la carretera Monterrey-Nuevo Laredo.

 

Casi dos años después, lo que las autoridades y su familia saben, es que el joven ingeniero fue secuestrado en un falso retén de Los Zetas, quienes nunca pidieron dinero alguno por su rescate, pues no estaban interesados en un rescate sino en sus conocimientos.

 

Ayer, la Procuraduría General de la República (PGR) ofreció un millón y medio de recompensa a quienes proporcionen datos que ayuden a localizarlo, y otro millón y medio por información que permita la captura de los responsables.

 

Egresado del Instituto Politécnico Nacional (IPN), con mención honorífica, en Ingeniería en Sistemas, Moreno Baca no tuvo complicaciones para conseguir empleo. Luego de colaborar con algunas compañías nacionales, fue contratado por la IBM para colaborar en proyectos de redes y comunicaciones electrónicas.

 

El 26 de enero, el joven le dijo a sus padres que manejaría hasta Laredo, Texas, para visitar a un amigo suyo que acababa de convertirse en padre. Su madre le insistió que tomara un vuelo, pero él prefirió manejar, pues aprovecharía para comprar unos equipos en los Estados Unidos que se traería de regreso.

 

A bordo de su vehículo Mazda de color rojo, salió de su domicilio en el Distrito Federal la madrugada del jueves 27 de enero de 2011. Diez horas mas tarde, llegó a Monterrey, donde comió y platicó durante dos horas con un amigo.

 

A las 20:50 horas, el ingeniero de la IBM pasó la caseta ubicada a la altura del municipio de Sabinas Hidalgo, en Nuevo león, y continuó su ruta a Nuevo Laredo; aprovechó también para llamar a sus padres y luego con su celular escribió el mensaje en Facebook. Al día siguiente, el amigo de Alejandro en Laredo se comunicó con su familia, para decirles que no había llegado.

 

El padre de Alejandro, un ingeniero especializado en la construcción, relató a la PGR que nunca recibieron una llamada para pedir rescate, una amenaza, una extorsión, nada.

 

Organizaciones no gubernamentales que fueron contactadas por la familia les informaron que en el tramo carretero donde desapareció el ingeniero, conocido como La Ribereña, han desaparecido más de 200 personas en los últimos cuatro años, muchos de ellos profesionistas.

 

Trabajo forzado

 

A finales de 2011, elementos del Ejército Mexicano detuvieron a Marco Garza de León Quiroga, El Chabelo, líder regional de Los Zetas en Sabinas, Hidalgo, junto con 14 policías de diversos municipios.

 

En sus declaraciones ante la PGR reconocieron que Moreno Baca fue secuestrado en un falso retén, con el objetivo de que trabajara en la instalación de una red de radio comunicaciones en la entidad. Agregó que un mes después del secuestro, el ingeniero fue asesinado y su cuerpo disuelto en ácido.

 

De 2011 a la fecha, la PGR ha documentado al menos cinco averiguaciones previas de desapariciones similares y de personas cuyo común denominador es tener conocimiento de computación, electrónica, redes, y hablar inglés.

 

A estos casos se suman otros diez de los que la PGR tuvo conocimiento a través de un informe de la Comisión de Seguridad del Senado, y relacionados con profesionistas desaparecidos.

 

La PGR presume que estas personas fueron secuestradas para ser obligadas a colaborar en los sistemas de comunicación clandestina de Los Zetas, los cuales incluyen la instalación y calibración de las antenas, así como su operación con computadoras y software especializado, que sea incluso capaz de encriptar señales.

 

Apenas en diciembre del año pasado, efectivos del Ejército Mexicano desmantelaron una de estas redes en Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila y San Luis Potosí, y además de las 167 antenas que se aseguraron, también se encontraron 71 equipos de cómputo.

 

Pese a ellos, las autoridades saben que se necesita de los mismos técnicos que instalan los equipos para mantenerlos funcionando, por lo que al menos en el caso de Moreno Baca, no se descarta que pudiera continuar secuestrado.

 

Red desarticulada en diciembre del 2011 por SEDENA

(Tamaulipas, Nuevo León y San Luis Potosí)

*167 antenas

*155 repetidoras

*166 fuentes de poder

*1446 radios

*71 computadoras

*2660 teléfonos móviles