El Banco de México (Banxico) ajustó su pronóstico de crecimiento para la economía mexicana en 2012 de un rango de 3.25 a 4.25 por ciento a un intervalo entre 3.5 y 4.0 por ciento, pues argumentó que la atonía mundial ya comienza a afectarle.
El gobernador del banco central, Agustín Carstens, informó que el pronóstico de crecimiento para 2013 se mantiene entre 3.0 y 4.0 por ciento, aunque reiteró la necesidad de llevar a cabo reformas estructurales para un mayor avance económico.
Al dar a conocer el “Informe sobre la inflación, julio-septiembre 2012”, estimó que la inflación general anual se sitúe muy cerca de 4.0 por ciento al cierre de este año y que en 2013 continúe a la baja, para ubicarse dentro del intervalo 3.0 y 4.0 por ciento.
En rueda prensa, dijo que aunque existe preocupación porque la inflación general anual se ha mantenido arriba de 4.0 por ciento por cinco meses consecutivos, el Banxico calcula que en septiembre pasado ésta alcanzó su punto más alto.
No obstante, si no se confirma este cambio de tendencia y la inflación general sigue en aumento, sería procedente realizar un ajuste “preventivo” en la tasa de interés de referencia para anclar las expectativas de inflación y no comprometer su convergencia al objetivo de 3.0 por ciento, expuso.