En medio de la cruzada antinmigrante de la administración Trump, un juez federal bloqueó la intención del presidente republicano de asumir el control de la Guardia Nacional en California y desplegarla en Los Ángeles, en el contexto de protestas por redadas migratorias.
La medida, considerada por el gobernador Gavin Newsom como “deliberadamente incendiaria”, quedó revertida por la orden del juez Charles Breyer, quien calificó la acción presidencial como “ilegal”.
Gobernador de California pidió impedir que Trump despliegue tropas
La decisión da la razón a la solicitud de emergencia presentada por Newsom, quien pidió impedir que la administración federal usara tropas con fines de control civil. Su demanda buscaba una orden de restricción temporal para evitar que tanto la Guardia Nacional como marines en servicio activo los emplearan en tareas de aplicación de la ley durante las manifestaciones.
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Los disturbios, desencadenados por las redadas de inmigración a gran escala impulsadas por la Casa Blanca, se han extendido por el país. En respuesta, el gobierno federal activó a unos cuatro mil efectivos de la Guardia Nacional y movilizó a cientos de infantes de marina. El Departamento de Justicia defendió el uso de estas fuerzas bajo el argumento de que su misión era proteger a las autoridades federales, no patrullar ni intervenir en actos civiles.
Sin embargo, la Corte dio prioridad a la autonomía estatal y al riesgo de “daños irreparables” a las comunidades locales. El fallo no prohíbe que la Guardia custodie propiedades federales, pero limita su intervención directa en las calles. Con esta resolución, la Guardia Nacional regresa al mando del gobernador de California, y se reafirman los límites constitucionales al uso militar en suelo estadounidense.
Escándalo político: expulsan a senador
Horas antes, en una escena que ha desatado una ola de indignación política en Estados Unidos, el senador demócrata Alex Padilla fue expulsado por la fuerza de una conferencia de prensa en Los Ángeles mientras exigía explicaciones sobre las recientes redadas migratorias. El acto, captado por medios, ocurrió durante una intervención de Kristi Noem, secretaria de Seguridad del gobierno de Trump, quien encabezaba el evento para justificar el despliegue militar en la ciudad.
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“Soy el senador Alex Padilla. Tengo preguntas para la secretaria”, alcanzó a decir antes de que lo empujaran fuera de la sala por dos agentes de seguridad. Su remoción no sólo evidenció un endurecimiento del discurso oficial, sino también una creciente intolerancia a las voces disidentes dentro de las instituciones del propio Estado.
El fallo judicial marca un nuevo capítulo en el pulso entre la administración Trump y estados gobernados por demócratas, en un contexto donde la retórica antimigrante y las protestas sociales siguen escalando.
Editor de la sección Mundo en el diario 24 HORAS. Egresado de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, con experiencia en redacción, traducción y proyectos editoriales en medios de comunicación.