Usain Bolt obtuvo este sábado por cuarta ocasión el premio al Atleta Mundial del Año, otorgado por la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF, por sus siglas en inglés), al superar al vallista estadounidense Aries Merritt y al semifondista keniano David Rudisha.

 

El velocista jamaiquino, que defendió sus medallas de oro en los 100 y 200 metros en los Juegos Olímpicos de Londres, también había recibido el premio en 2008, 2009 y 2011. Es el primer atleta en la historia que conquista el oro en ambas pruebas en dos Olimpiadas distintas.

 

“Para mí es un gran honor ganar por cuarta vez. Trabajé verdaderamente duro, y estuve muy concentrado este año. Esta temporada fue una de las más difíciles que he tenido. Tuve mis altibajos, e incluso es difícil hablar de ellos”, dijo Bolt, quien agradeció a su entrenador y al público de Londres 2012.

 

“Los Juegos de Londres fueron magníficos. Los seguidores estaban en el estadio desde las 10:00 de la mañana. Nunca había visto algo así”.

 

La velocista estadounidense Allyson Felix ganó el premio de la Atleta Mundial del Año. Las otras finalistas fueron la neozelandesa Valerie Adams, lanzadora de bala, y la británica Jessica Ennis, quien conquistó al público de su país al ganar el oro olímpico en el heptatlón.

 

Los ganadores fueron anunciados en el último día de los festejos por el 100mo aniversario de la IAAF.

 

En 2003, Bolt y Felix ganaron el premio a la Estrella en Ascenso, que se entrega a las mayores promesas del atletismo.

 

“Hace nueve años yo estaba aquí con Allyson. Ahora estoy de regreso. Eso significa que me estoy volviendo viejo, lo que me preocupa un poco”, dijo Bolt, de 26 años. Pero seguiré trabajando duro”.

 

Felix ganó los 200 metros en Londres, luego de conformarse con la plata en Beijing 2008.

 

“Mis mayores derrotas han llegado en los Juegos Olímpicos. Después de Beijing estaba devastada. Había trabajado lo más duro posible, pero me faltó”, consideró. “Sin embargo decidí volver con más dedicación todavía y esto fue una bendición. Pude trabajar más duro que nunca antes, y finalmente todo se dio bien”.