A 13 días de los disturbios del pasado 1 de diciembre en el Distrito Federal, en el marco de la toma de protesta del presidente Enrique Peña Nieto, ni las autoridades federales ni las capitalinas investigan a los mandos que instrumentaron el operativo policiaco.

 

De acuerdo con la orden de operaciones de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina (SSPDF), 41 jefes policiacos ordenaron el despliegue de más de cinco mil elementos, los cuales actuaron coordinadamente con mandos del Estado Mayor Presidencial y la Policía Federal.

 

El despliegue logró que la toma de posesión de Peña Nieto se llevara a cabo en San Lázaro, así como el discurso posterior en Palacio Nacional. Pero en las calles, el saldo de los enfrentamientos fue de seis heridos, dos de ellos graves, 65 inmuebles saqueados y por lo menos 30 detenciones arbitrarias.

 

En este contexto el Procurador capitalino, Rodolfo Ríos Garza, comentó en conferencia que la PGJDF no investigará a los mandos de la policía capitalina por negligencia u otra responsabilidad, pues es un trabajo que en primera instancia le corresponde realizar a la SSPDF.

 

Sostuvo que una vez finalizada esa indagatoria de carácter administrativo, será la Secretaría de Seguridad Pública la que defina si presenta una denuncia por alguna responsabilidad de tipo penal.

 

A nivel federal, el titular de la PGR, Jesús Murillo Karam, señaló en una entrevista radiofónica que aún no hay una averiguación previa abierta por el caos, pese a que la PGJDF dijo que envió, desde la semana pasada, los expedientes relacionados con las personas lesionadas.

 

“Instaurada (la averiguación previa) todavía no, será a partir de recibir los informes precisos, concretos y muy claros que podríamos determinar si se inicia o no” indicó el procurador.

 

La Procuraduría capitalina declinó su competencia para la indagar las lesiones, bajo el argumento de que los probables responsables de las lesiones serían elementos de a Policía Federal.

 

EL DATO

 

18 denuncias ha recibido la PGJDF por daños a bancos, restaurantes, hoteles, oficinas de gobierno y tiendas, entre otros… y se esperan más.