EL CAIRO. Decenas de personas murieron en un bombardeo aéreo del ejército sirio contra una gasolinera en la localidad de Al Maliha, en las proximidades de Damasco, informaron grupos opositores.

 

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos y la Comisión General de la Revolución Siria aseguraron que el ataque contra la gasolinera desató un incendio y causó la muerte de decenas de personas, varias de ellas calcinadas.

 

La opositora Red Sham precisó en un comunicado que al menos 40 personas perecieron y muchas resultaron heridas, mientras que los Comités de Coordinación Locales (CCL) elevaron la cifra a 70 muertos.

 

En los últimos días, el régimen sirio ha endurecido sus ataques contra las localidades ubicadas cerca de Damasco, donde han estallado también choques violentos entre los combatientes rebeldes y las fuerzas gubernamentales.

 

También, al menos doce personas, todas miembros de la misma familia y en su mayoría niños, murieron en otro bombardeo aéreo contra una panadería en la localidad de Muazamiya, en la periferia de la capital siria, según los grupos opositores.

 

Por otro lado, alrededor de cuarenta personas, entre ellas varias mujeres, fueron detenidas cerca de un puesto de control en la autopista de Al Arbein, en Muazamiya, según los Comités de Coordinación Local, que no explicaron el motivo de su arresto.

El periodista estadounidense James Foley se encuentra desaparecido en Siria desde hace 41 días, denunció su familia, que ha lanzado una campaña para informar de su secuestro y exigir su liberación.

 

Los familiares de Foley, que ofrecía colaboraciones desde el país, aseguraron en un comunicado que un grupo desconocido de hombres armados lo secuestró en una zona del noroeste del país el pasado 22 de noviembre.

 

Además, señalaron que no han vuelto a tener ninguna noticia del periodista desde entonces y pidieron que sea puesto en libertad sin sufrir daños.

 

Foley “ha informado de forma independiente y objetiva desde Oriente Medio en los últimos cinco años”, apuntó la nota, que figura en una página que sus parientes han creado en internet para demandar su liberación.

 

El estadounidense había cubierto conflictos como los de Irak, Afganistán y Libia.

 

En este último país fue capturado en mayo de 2011 por las fuerzas del difunto coronel Muamar al Gadafi durante la pasada guerra contra los rebeldes, juzgado por haber entrado ilegalmente en territorio libio y posteriormente liberado.

 

Ayer la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay informó que al menos 60 mil personas han perdido la vida en el conflicto sirio desde marzo de 2011 hasta noviembre de 2012.