Se dice -y se dice bien- que el cine surge no en el set de filmación sino en el cuarto de edición. Es hasta que se monta el material filmado que podemos ver una película y no simples trozos de fotogramas inconexos.
Este dicho cobra especial relevancia en Cloud Atlas, una cinta por demás ambiciosa e interesante; un experimento que vale la pena verse en cine pero que a su vez resulta en un inevitable, aunque muy vistoso, fracaso.
Basada en la novela homónima escrita por el inglés David Mitchell en 1994, Cloud Atlas lleva la narrativa de las “historias cruzadas” (tan en desgaste hoy en día) a un extremo total. Bajo la premisa (nada original) de que todas nuestras acciones como seres humanos están conectadas, incluso más allá del momento inmediato de cometerlas, la cinta despliega seis historias en seis momentos narrativos diferentes. Para ello, esta película cuenta no con uno, ni con dos, sino con ¡tres directores!: los famosos hermanos Wachowski (ahora con Lana, antes Larry), a quienes recuerdan por ese clásico llamado The Matrix (1999), junto con el germano Tom Tykwer, director de Corre Lola Corre (1998).
Así, durante casi tres horas, la cinta nos muestra la historia de una embarcación que surca el Pacífico en 1849, la relación creativa entre un músico y su joven aprendiz en 1936, las aventuras periodísticas de una reportera investigadora en la década de los setenta, los problemas de un viejo editor de libros en la época actual, la rebelión en la Neo-Seúl de 2144 y la vida en un mundo post apocalíptico del siglo 23.
El reparto de actores en todas estas historias es el mismo, interpretando papeles diferentes en cada caso: Tom Hanks, Halle Berry, el gran Jim Broadbent, Hugo Weaving, Hugh Grant, entre otros; todos ellos cambiando de aspecto escondidos tras prostéticos, pelucas y maquillaje.
El resultado inicial es caótico y por momentos frustrante, la historia se nos despliega en orden cronológico, con cortes espaciados que cada vez suceden con más frecuencia. Así, justo cuando nos empezamos a divertir con la historia de Jim Broadbent como un atribulado editor huyendo de la mafia, nos cortan la acción a la no tan interesante historia de los hombres en el barco de 1849… y cuando estos atrapan nuestra atención, de nuevo otro corte, ahora para brincar a 2144; así sucesivamente en un constante y muy frustrante coitus interruptus narrativo.
Empero, hay un momento en que el experimento funciona: cada historia se despliega como diferentes ríos que por momentos -sólo por momentos- convergen en un solo caudal. Es entonces cuando todo este caos se convierte en una sola película, un acto casi de magia no por parte de los directores sino del editor, Alexander Berner, en cuyos hombros recae la responsabilidad y el mérito real de esta cinta.
Cuando las nubes se disipan vemos la realidad: esto no son más que seis cortometrajes unidos con calzador, peleando entre si por nuestra atención y con un “mensaje” innecesario que se agota pronto. Una lástima, ya que un experimento tan interesante merecía mayor sustancia, algo más que aire, nubes y frases llegadoras.
Cloud Atlas (Dir. Tom Tykwer y los Wachowski Bros.)
2 de 5 estrellas.
Con: Tom Hanks, Halle Berry, Jim Boradbent, entre otros.