La población de Matamoros de La Laguna, Coahuila, se quedó sin policías municipales a partir de las nueve de la mañana de hoy, ya que cuando los uniformados se disponían a celebrar “su día” en las instalaciones de la corporación, fueron asegurados mediante un operativo militar-policiaco para supuestamente trasladarlos a las pruebas de control de confianza a la localidad de Ramos Arizpe.

 

La vigilancia en la ciudad quedó a cargo de agentes de la Policía Operativa del Estado con apoyo de personal de las Fuerzas Federales.

 

Fue alrededor de las nueve de la mañana con cinco minutos cuando 75 uniformados, incluido su director Edgar Cabrera, se encontraban en las instalaciones de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) donde ya estaban dispuestos los manteles largos para festejar el día del policía.

 

En ese momento irrumpió un contingente de militares, policías de la entidad y de las Fuerzas Federales de Apoyo a bordo de por lo menos 20 vehículos de esas corporaciones para asegurar a los policías municipales a los que subieron a tres autobuses de pasajeros.

 

Para llevar a cabo el operativo, los agentes contaron con el apoyo de la tripulación de dos helicópteros, que sobrevolaban el área donde se ubica la corporación policiaca del municipio.

 

Voceros de la policía de Coahuila informaron que los uniformados municipales de Matamoros no están en calidad de detenidos, que serían trasladados a la ciudad de Ramos Arizpe, Coahuila, para someterlos a las pruebas de control de confianza, anti-doping y polígrafo, entre otras que se requieren.

 

Serán por lo menos tres días los que los agentes de la DSPM se encuentren en el Centro de Control de Confianza de aquella ciudad.