La PGR congeló desde hace unos días por presuntos nexos con el crimen organizado las cuentas bancarias de la minera Materiales Industrializados, S.A. de C.V. (MINSA), de la que es socio Armando Guadiana Tijerina, y que manejaría ingresos superiores a los 200 millones de pesos al año.
El empresario negó a VANGUARDIA cualquier conexión con la delincuencia, dijo que la intervención federal es una “aberración” y señaló que también fue inhabilitada una cuenta bancaria de su hermano José Luis, y que las autoridades rastrean desde hace semanas bienes y propiedades suyas y de su familia.
“Efectivamente, se iniciaron las averiguaciones antes del primero de diciembre, todavía en el sexenio anterior (de Felipe Calderón)”, explicó. “Desde ese entonces yo les manifesté que la información personal y de cualquiera de las empresas en que tuviera injerencia un servidor, pues que estaba a disposición”.
“Han congelado las cuentas de una empresa relacionada con el carbón de la cual un servidor es socio… como si el dinero hubiera sido mal habido…”, añadió, “yo creo que son acciones mal tomadas y que afectan más la actividad empresarial y fundamentalmente de los trabajadores… en lugar de investigar de dónde entró el dinero y a dónde se está yendo”.
Dijo que, por responsabilidad social, su empresa ha solventado los compromisos laborales pese al congelamiento de las cuentas, que afectaron a unos 800 trabajadores.
Tras la ejecución de un hijo de Humberto Moreira Valdés en Ciudad Acuña, y del abatimiento en Progreso de Heriberto Lazcano, líder máximo del Cártel de los Zetas en el País, el pasado 24 de octubre el exgobernador aseguró a VANGUARDIA que en Coahuila hay “narcomineros” que financiaron al crimen organizado.
En los siguientes días, en una guerra mediática, Moreira Valdés y Guadiana se hicieron señalamientos mutuos; también se difundió que tanto la PGR como la Secretaría del Trabajo Federal y la Comisión Nacional de Derechos Humanos tenían conocimiento, y que se habían hecho denuncias e investigaciones por la participación del crimen organizado en la minería coahuilense.
Guadiana dijo ayer que la intervención de las autoridades bancarias a petición de la PGR es parte de estas investigaciones.
“Y luego, aparte investigando si algunas gentes de mi familia qué propiedades tienen… esto se deriva de una persecución política, porque esto lo iniciaron en el mes de noviembre (2012), no fue que se hayan iniciado el 1 de diciembre (cuando entró Enrique Peña Nieto).
“Yo no sé para qué… pierden menos tiempo si se dirigen a la empresa pidiendo la información que requieran y se hubieran ahorrado tiempo y estoy seguro que hubieran cerrado ya la investigación”, declaró.
Categórico al negar nexos con el crimen organizado, Guadiana señaló que busca recuperar sus cuentas bancarias mediante amparos.
“Desgraciadamente la autoridad judicial, lejos de apegarse a la Ley y Jurisprudencia existentes, pues le dan ‘ñañaras’ para tomar decisiones (para conceder el amparo)… andan allí entre ‘azul y buenas noches’. Lo que deben otorgar es la suspensión provisional (y restituir las cuentas).
“Yo quisiera que se hubieran venido contra mí como debe ser, como les he dicho… son autos de autoridad mal llevados… yo estoy de acuerdo cuando se trate de un delincuente perseguido por la justicia por muchos años”, señaló.
“Estamos ofreciendo la información, porque no nos la piden, para que cuanto antes acaben y cierren la investigación”, expuso. “Es una aberración total, creo que es consecuencia de las actividades a través de Claridad y Participación Ciudadana, pero pues ni modo, estamos dispuestos a todo, afortunadamente no tenemos pecado alguno”.
Los ingresos de MINSA, dijo, provienen de la venta de carbón a la CFE a través de la Prodemi y el cobro por servicios a AHMSA y a varias fundiciones de Monterrey, Guadalajara y la Ciudad de México.
Aseguró que no teme a una orden de aprehensión en su contra o de su hermano, y que él mismo se presentará ante la PGR en los próximos días.
“No necesito que haya (órdenes de presentación o aprehensión en su contra)… yo me voy a presentar en el curso de estos días para decirles: ‘¿Qué es lo que quieren saber?’. A mí ni me preocupa ni el sueño me quita, ni me lo ha quitado, por eso no necesito ni amparo, no tengo nada que ocultar”, concluyó.