El Príncipe Harry de Inglaterra ha dejado clara su posición sobre seguir en servicio para las tropas militares en Afganistán, sin embargo el batallón Apache al que pertenece, no regresará a la operación militar debido a la retirada de tropas a finales de 2014.
El heredero británico se encuentra ahora en un descanso de 30 días luego de terminar las 20 semanas de tareas militares que le correspondían y prevé su regreso a la base aérea de Suflock para recibir entrenamiento y cambiar su grado de copiloto a piloto aviador.
Dado su grado de capitán en el ejército británico, el aristócrata podría aplicar para un puesto administrativo en las fuerzas, sin embargo es probable que él elija 10 años más servicio como piloto; lo que significaría que Harry podría ir de nuevo al frente bélico pero sólo si Inglaterra vuelve a la guerra en algún momento.
En días pasados, el Capitán Gales, como es conocido en su batallón, fue tachado de cobarde por los talibanes al calificar comparar la guerra con los videojuegos.