El jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, dijo en una entrevista con el diario La Nación, que la estrategia de la guerra de Felipe Calderón contra las drogas es fallida, y señaló que en su lugar, él buscaría aclarar los crímenes cometidos por las fuerzas de seguridad antes de concluir su mandato, el 1 de diciembre de 2012.

 

Ante el cuestionamiento sobre si considera justa la denuncia que enfrenta Felipe Calderón ante la Corte Internacional por crímenes contra la humanidad, Ebrard señaló que “Hay que distinguir entre los crímenes de las organizaciones criminales, de los que un gobernante no es culpable, y los crímenes cometidos por las fuerzas de seguridad. Si yo fuera Calderón, antes de entregar el poder aclararía este segundo punto”, aseguró.

 

“Calderón planteó la guerra al narcotráfico con el objetivo de destruir los principales cárteles de México y reducir el crecimiento de las adicciones de droga. Pero no ha logrado sus objetivos; es una estrategia claramente fallida”, agregó el jefe capitalino.

 

Ebrard Casaubón advierte, también, que “el narcotráfico puede infiltrarse en la campaña electoral de 2012″ y puntualiza: “Hay que fiscalizar a todos los candidatos”.

 

Durante la conversación, Marcelo Ebrard fue cuestionado sobre la posible injerencia del narcotráfico en los próximos comicios de 2012 y la lucha contra el crimen que encabeza el gobierno de Felipe Calderón.

 

-Para combatir a los cárteles de la droga hay quien, como el ex presidente Vicente Fox, ha propuesto una ley de amnistía – le inquiere el reportero.

–Lo que plantea Fox es un absurdo, una rendición incondicional. De entrada, hay que desmilitarizar el país; se mandó al ejército a combatir contra un enemigo al que no puede vencer porque es parte de la sociedad.

Además, hay que coordinar estrategias con Estados Unidos; no tiene sentido mantener una guerra cuando tu vecino del Norte está siguiendo otra estrategia, como cierta legalización de la marihuana en algunos estados.

Y en tercer lugar, hay que invertir en educación para que los jóvenes estén en las escuelas y no en las redes de la delincuencia organizada.

 

–En algunos estados el narcotráfico ordena y manda. ¿Hay riesgo de que México se transforme en un narco estado?

–No lo creo –responde Ebrard–, pero lo que sí veo es una influencia muy importante del crimen organizado en algunos estados y un riesgo serio de que se infiltre en el proceso electoral financiando campañas, porque no hay un control efectivo sobre los recursos de los partidos. Además, los narcotraficantes tienen el poder de amenazar a candidatos y de matarlos. Hay una total impunidad en los homicidios políticos.

 

-Entonces,  las elecciones de 2012, están marcadas por la sombra del narcotráfico…

-Podríamos evitarlo. Yo propongo la creación de un órgano estatal que fiscalice el patrimonio de todos los integrantes de las listas electorales de los partidos. Al mismo tiempo, debemos proteger a los candidatos de cierto rango amenazados. Tal vez podríamos asignar esta tarea a, digamos, 1000 de los 3000 efectivos del ejército que hoy cuidan del presidente. Y abrir una fiscalía que se ocupe sólo de los homicidios políticos.