Gracias a los trabajos de investigación, como el hallazgo de la diosa Coyolxauhqui, la información acerca de la cultura mexica  fue reabierta en la ciudad de México y para el mundo y sigue acrecentándose, destaca el arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma, destacado investigador y difusor de la cultura mesoaméricana.

 

Al cumplirse 35 años de que obreros de la entonces compañía Luz y Fuerza del Centro hallaran la enorme piedra circular de 3.25 metros de diametro y 30 centímetros de espesor, en el Museo del Templo Mayor iniciaron este fin de semana los festejos del descubrimiento con el coloquio gratuito “Coyolxauhqui. A 35 años de su hallazgo“, organizado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

 
                        El monolito de Coyolxauhqui fue colocado durante el gobierno de Axayácatl, entre 1469 y 1481, al pie de las escalinatas del adoratorio del dios Huitzilopochtli, en el Templo Mayor.

 

El hallazgo de sangre humana en una decena de navajillas y cajetes de 500 años de antigüedad, recuperados en 2012 en la Plaza Manuel Gamio, del Centro Histórico, así como las primeras hipótesis al respecto, serán parte de este ciclo de conferencias conmemorativas.

 

La arqueóloga Lorena Vázquez Vallín tiene muestras de que se realizaba autosacrificio, como parte de una ofrenda de consagración, lo que fue parte del estudio a un  juego de tres cajetes con tapa, que contenían 10 navajillas de obsidiana en las que se identificaron residuos de sangre humana.

 

Como algunos atractivos está el que Vázquez Vallín expondrá su tema el 23 de febrero, en la conferencia “Contextos rituales frente al Templo Mayor. Ofrendas de consagración y de clausura”, junto con los arqueólogos y antropólogos físicos que integran el equipo del Programa de Arqueología Urbana (PAU).

 

“Al profundizar la investigación en documentos históricos, escritos por los cronistas Diego Durán, Bernardino de Sahagún y Toribio de Benavente ‘Motolinia’, y de acuerdo con bajorrelieves de banquetas e imágenes de piedras labradas, se llegó a la conclusión de que las navajillas fueron utilizadas para autoinflingirse con la finalidad de ofrendar sangre”, precisó la arqueóloga en adelanto e invitación a los capitalinos y sus visitantes a asistir a las distintas ponencias preparadas.

 

LA TRASCENDENCIA DEL HALLAZGO

 

Eduardo Matos. FOTO: NOTIMEX
Eduardo Matos. FOTO: NOTIMEX

 

Matos Moctezuma, doctor en antropología, ofreció la primer ponencia del círculo “Entre mujeres te veas: Coyolxauhqui y Tlaltecuhtli”.
Desde inicios del proyecto fue uno de los principales promotores para la difusión de los descubrimientos, que iniciaron el 21 de febrero de 1978, cuando la diosa de la Luna fue ubicada en el cruce de las calles República de Argentina y República de Guatemala, mientras empleados de luz colocaban nuevas líneas, considerada uno de los más grandes hallazgos enterrados.

 

Para el experto, la trascendencia del hallazgo de la diosa Coyolxauhqui, es que ya está establecido todo un centro de investigación que es, de hecho, el tercero más visitado en México. En promedio medio millón de personas al año asisten a él, después del Museo de Antropología y del Castillo de Chapultepec.

 

“Lo que más nos interesa es que la investigación siga, que se continúe trabajando, excavando y publicando”, refirió el autor del volumen La muerte entre los mexicas (2010). Hasta ahora, agregó, “el objetivo se ha conseguido a través de conferencias o publicaciones.”

 

Como cada año, el INAH celebra el hallazgo y es así como poco a poco se se han ido dando a conocer todos los hallazgos. Con más de 400 publicaciones, el Templo Mayor es el proyecto que más publicaciones ha hecho en su historia. Matos cuenta que se han elaborado y publicado artículos, libros de difusión y de carácter científico, tesis y catálogos; además de editado estudios emprendidos por expertos externos.

 

Ante un aforo lleno, el doctor Matos precisó las características simbólicas que explican la cosmovisión de los Mexicas, a partir de tres elementos fundamentales: La piedra del Sol y los mitos de la Coyolxauhqui y la Tlaltecuhtli.

 

En ellos se han revelado pigmentos que ayudan a comprender los hallazgos posteriores, además señaló se continúa un estudio de materiales asociados a la Coyolxauhqui, una labor que, de acuerdo con Matos, nunca terminará.

 

Tlaltecuhtli. FOTO: NOTIMEX
Tlaltecuhtli. FOTO: NOTIMEX

 

ES TIEMPO DE UN ANECDOTARIO

 

El doctor Matos Moctezuma adelantó que próximamente publicará un “anecdotario del Templo”, donde contará parte de sus experiencias vividas a raíz de su trabajo antropológico y obviamente el hallazgo de la diosa de ocho toneladas de peso.

 

En tanto, anunció que su más reciente publicación “Escultura monumental Mexica” será dada a conocer el próximo 23 de febrero en la Feria del Libro del Palacio de Minería.

 

MÁS HALLAZGOS

 

En tanto, el 23 de febrero, los arqueólogos Raúl Barrera Rodríguez (responsable del PAU), Rocío Morales, Estíbaliz Aguayo, Berenice Jiménez, y la antropóloga Perla Ruiz, explicarán los tratamientos realizados en cráneos y huesos durante la época prehispánica, entre ellos, cortes en cinco calaveras al nivel del parietal, para colocarse en un tzompantli del Recinto Sagrado de la urbe mexica.

 

El 16 de febrero, el arqueólogo Diego Jiménez Badillo se referirá al significado de las ofrendas 22 y 58 (localizadas en 1980 en la esquina norte de Templo Mayor), a través de la ponencia “Evidencias del culto a la tierra en dos ofrendas del Templo Mayor”, en la cual explicará que ambas “fueron creadas por los mexicas para ofrecer fuerzas germinativas a la tierra, es decir, restituirle lo que ella les daba durante las cosechas”.

 

En tanto el 2 de marzo, la ponencia “Conservación y restauración de hallazgos arqueológicos en la Plaza Manuel Gamio” será abordada por las restauradoras María Barajas, Lucía Alatorre y Patricia Campos, quienes darán a conocer el criterio de conservación de materiales prehispánicos en el Museo del Templo Mayor.

 

Sábados de febrero a las 10:00 y 14:00 horas.

 

Auditorio Eduardo Matos del Museo del Templo Mayor

Coordina: Pedro Ibarra Mosqueda.
Actividad gratuita. (Presentando el boleto de acceso al museo)
Informes 4040 5600, extensión 412934
Programación sujeta a cambios.
En caso de cancelación de algún evento o actividad, el Museo del Templo Mayor lo dará a conocer a través de su sitio de internet y por correo electrónico a los usuarios registrados.
El auditorio Eduardo Matos Moctezuma del Museo del Templo Mayor tiene un aforo de 139 lugares, que por cuestiones de seguridad tiene que respetarse cabalmente.