La explosión en el edificio B2 de la oficina de Petróleos Mexicanos fue un hecho aislado, “un accidente tal cual en un área administrativa y no en una operación industrial”, por lo que la tesis de un atentado ha sido descartada en su totalidad, señaló Emilio Lozoya Austin, director la paraestatal.

 

En entrevista con Ricardo Rocha para Radio Fórmula, el funcionario, aseguró que “Pemex tiene que invertir más en las áreas que resulten más redituables desde el punto de vista económico, pero también tiene que invertir más en la parte de seguridad y mantenimiento”.

 

“Todo eso se puede sin la necesidad de una reforma (…); el coyotaje en esta empresa desaparecerá, está desapareciendo”. Y además, dijo, Pemex tendrá un perfil eficiente y moderno.

 

“Debe transformarse hacia una empresa que sea manejada como una empresa con una visión comercial que pague muchos impuestos, porque es una empresa del Estado; estos impuestos en un país donde todavía existe tanta pobreza sin duda que es un instrumento fundamental.

 

El funcionario federal descartó la tesis de un atentado contra la compañía, enfocándose en ubicar la fuente del gas metano que, según la Procuraduría General de la República, desató la explosión el jueves 31 de enero, con un saldo de 37 personas fallecidas.

 

“Eso no quiere decir que las investigaciones no terminen y que se tengan que deslindar responsabilidades en el caso de que las haya”, dijo Lozoya. Ello podría durar varias semanas.

 

(Con información de Radio Fórmula)