DALLAS. El crucero Carnival Triumph atracó finalmente esta noche en el puerto de Mobile, Alabama, con lo que terminó la pesadilla que durante cinco días sufrieron las más de cuatro mil 200 personas que transportaba.

 

El presidente y director general de Carnival Cruise Lines, empresa propietaria del navío, Gerry Cahill, anunció a través de la red social Twitter que el Triumph llegó a Mobile a las 21:40 horas locales de este jueves (03:40 GMT del viernes).

 

El pasado domingo el Triumph, de 14 pisos y 900 metros de largo, se encontraba a 240 kilómetros de la península de Yucatán navegando rumbo a Texas para concluir una de sus dos travesías semanales por el Caribe, cuando se registró un incendio en su cuarto de motores.

 

El siniestro fue controlado pronto sin que causara lesionados, pero dañó los motores y dejó al navío a la deriva y con muy escasa capacidad de generación eléctrica.

 

El incendio provocó que las condiciones en el barco comenzaran a deteriorase con el paso de las horas, al dejar de funcionar los servicios sanitarios e inutilizar los aires acondicionados, obligando a los viajeros a dormir y permanecer en el exterior.

 

La falta de electricidad motivó también que se cortara el agua potable y que se perdieran toneladas de alimentos, lo que forzó racionar las comidas para los pasajeros, quienes tenían que hacer filas de hasta tres horas.

 

Horas después del incendio, la compañía Carnival envió tres remolcadores a encontrarse con el Triumph para llevarlo a Puerto Progreso, Yucatán, pero finalmente decidió trasladarlo a Mobile debido a que el viento ya lo había movido más al norte.

 

Durante cinco días, mientras el barco era remolcado lentamente, los tres mil 143 pasajeros y los mil 086 tripulantes debieron soportar el flujo de aguas residuales por los corredores y habitaciones, el mal olor que estas desprendían.

 

Además, los viajeros enfrentaron el calor, la escasez de agua potable, la imposibilidad de bañarse y otras incomodidades.

 

Carnival informó que el proceso del desembarco de los pasajeros en Mobile tomaría de entre cuatro y cinco horas, por la falta de servicios de los elevadores, la poca visibilidad y las condiciones del puerto que nunca antes había recibido una embarcación de tal calado.

 

La compañía alistó a un ejército de cientos de empleados para recibir a los pasajeros con alimentos, colchas y celulares, además de atender otras necesidades de los pasajeros cuando hayan desembarcado.

 

Una vez en tierra, los turistas podrán abordar autobuses que los conduzcan a Galveston, Texas, donde muchos de ellos dejaron estacionados sus automóviles para tomar el crucero, que salió de ese puerto hace siete días.

 

También los pasajeros podrán reposar si así lo desean en un hotel de Nueva Orleans, donde Carnival informó que ha reservado más de mil 500 habitaciones y contratado unos 100 autobuses y varios vuelos chárter para conducir a los viajeros a esa ciudad o a Houston.

 

La compañía naviera prometió que compensará a cada uno de los pasajeros con 500 dólares, un vuelo a su lugar de residencia y un reembolso completo de su viaje, además del pago de la mayoría de los gastos a bordo, así como crédito para otro crucero.

 

Carnival anunció esta semana que cancelaría las próximas 12 travesías del Triumph que estaban programados entre el 21 de febrero y el 13 de abril. Las dos travesías que estaban contempladas para el 11 y 16 de febrero ya habían sido canceladas.

 

El Triumph permanecerá las próximas semanas en un muelle en Mobile para ser reparado y acondicionado de nuevo.