El Vaticano analiza una posible anticipación del inicio del cónclave para elegir al sucesor de Benedicto XVI, aunque la normativa establece que se debe realizar entre 15 y 20 días después del inicio de la “sede vacante”.
El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, aseguró este sábado en un encuentro con periodistas que se estudia cómo deberá aplicarse la constitución apostólica “Universi Dominici Gregis” (De todo el rebaño del Señor), la ley que rige los detalles del cambio de pontífice.
“Este término ha sido fijado para esperar a los cardenales que deben llegar a Roma, pero en la eventualidad que todos hayan llegado sería posible anticipar” el cónclave, precisó el director de la sala de prensa de la Santa Sede.
“La situación en la cual nos encontramos es, de hecho, completamente nueva”, agregó Lombardi, al hacer referencia a que esta es la primera renuncia de un obispo de Roma en la historia moderna de la Iglesia católica.
Explicó que, por lo general, los cardenales eran convocados a la capital italiana a partir del inicio del periodo de “sede vacante”, que se producía al momento de la muerte del Papa, pero en esta ocasión se conoció desde antes por el anuncio de la renuncia de Benedicto XVI.
De hecho, el próximo 28 de febrero a las 20:00 horas local (18:00 GMT) entrará en vigor la renuncia del líder católico, anunciada el lunes, y para esa fecha gran parte de los purpurados estarán ya en Roma para asistir a una despedida formal, prevista para la mañana de ese día.
Aún así todavía no está definida la fecha exacta en la cual iniciará el cónclave, en el que participarán 117 cardenales “electores”, es decir que todavía no superaron los 80 años de edad, entre ellos tres mexicanos.
La “Universi Dominici Gregis” fue aprobada por el Papa Juan Pablo II el 22 de febrero de 1996, fiesta de la Cátedra de San Pedro Apóstol y se aplicó por primera vez con la muerte del propio Karol Wojtyla, en abril de 2005.