Dreamliner 787, el avión del futuro que desarrolló Boeing, estará bajo tierra al menos otros cuatro meses, mientras los investigadores intentan encontrar las causas del incendio de una batería y de las fallas en otra reportados el mes pasado por las dos principales aerolíneas japonesas, All Nippon Airways y Japan Airlines, anunció ayer la estadunidense United Airlines.

 

Como informó 24 HORAS, el nuevo modelo de Boeing elegido para transportar al Presidente de México, fue aterrizado de emergencia en todo el mundo por el riesgo que suponen los defectos que han salido a la luz.

 

United declaró ayer que pospuso por lo menos hasta el 12 de mayo los vuelos de la nueva ruta Denver-Tokio que debía iniciar el próximo 31 de marzo. Para todas las demás rutas que opera United con los Dreamliners, no se permitirá el despegue antes del 5 de junio.

 

Las autoridades japonesas, de Estados Unidos, así como del resto del mundo prohibieron el despegue de todos los 50 aviones Dreamliner existentes, tras una falla en una batería de litio durante un vuelo de la aerolínea All Nippon Airways (ANA) que provocó su aterrizaje de emergencia en Japón el pasado 16 de enero.

 

Anteriormente, una batería se incendió mientras el avión de la compañía Japan Airlines se encontraba estacionado el 7 de enero en el Aeropuerto Internacional Logan de Boston.

 

Los investigadores japoneses y estadunidenses todavía no han encontrado las causas de los problemas reportados con las baterías que alimentan los Dreamliner, el nuevo modelo desarrollado por Boeing y considerado como el avión del futuro.

 

Este viernes Boeing presentará a la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos una serie de propuestas para solucionar los problemas de las baterías de estas aeronaves.

 

Entre estas propuestas figuran la elaboración de un contenedor alrededor de dichas baterías y un nuevo diseño de las pilas que midan los cambios de voltaje y temperatura en las células que las conforman.

 

Hasta ahora ocho aerolíneas en el mundo operan los Dreamliners y varias otras, entre ellas Aeroméxico, tienen pedidos para estos aviones. Sin embargo, Boeing retrasó la entrega de estas aeronaves mientras se realizan las investigaciones necesarias, pero la construcción de ellas sigue en curso.