Hay indicios de un presidencialismo vertical en el gobierno de Enrique Peña Nieto, así lo señaló el coordinador del PRD ante el Senado Miguel Barbosa.
Barbosa destacó también que a 100 días de iniciada la gestión del mandatario priísta existen signos de un poder absoluto.
A través de un comunicado de prensa, el senador priísta hace un balance de los más de tres meses que han transcurrido desde la toma de posesión de Peña Nieto como presidente de la República Mexicana y afirma que esta actitud por parte del ejecutivo nacional se da cuando el país necesita y reclama un ejercicio democrático del poder.
El legislador perredista también aseguro que los verdaderos resultados de las políticas económica y social del gobierno federal podrán verse más allá de los primeros cien días de administración.
En ese sentido apuntó que la Cruzada Nacional Contra el Hambre no es más que un conjunto de programas sociales ya existentes o la imitación de otros.
Por otra parte, Barbosa destacó que las acciones que han marcado estos primeros meses de presidencia, son las reforma educativa y laboral, así como el arranque la Cruzada contra el Hambre y la aprehensión de la ex lideresa del Sindicato Nacional de trabajadores de la Educación, Elba Esther Gordillo.
También criticó que el gobierno y su equipo de trabajo lleven a cabo acciones específicas para ensalzar la imagen del ejecutivo, además de la ola de hechos violentos que han derivado de la lucha contra el crimen organizado.