WASHINGTON. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, habló ayer con líderes republicanos en la Cámara de Representantes, para abordar aspectos vitales de su agenda legislativa, como son , inmigración, control de armas y en particular el presupuesto del Gobierno federal y el déficit fiscal.

 

La visita a este cuerpo congresional, donde los republicanos son mayoria, forma parte de la ofensiva iniciada esta semana en el Capitolio, tras la entrada en vigor el 1 de marzo del llamado secuestro de fondos, una serie de reducciones automáticas al gasto gubernamental por más de 85 mil millones de dólares en el año fiscal 2013.

 

En el contexto de estos debates, el ex candidato presidencial republicano y jefe del Comité de Presupuesto de la cámara baja, Paul Ryan, presentó este martes un nuevo proyecto de financiamiento con recortes por casi seis billones de dólares en la próxima década y disminuye el tope de la tasa impositiva de 39,6 a 25 por ciento.

 

Ryan, que prevé incrementar el gasto de defensa, hizo un llamado a que las autoridades en Washington actúen de forma expedita para evitar lo que denominó como la bancarrota nacional que se aproxima, señala el sitio digital The Hill.

 

La Casa Blanca reaccionó de inmediato y señaló a través de su vocero que una medida como esta no resuelve el tema del déficit fiscal porque no incluye un alza en las tasas tributarias a los estadounidenses más ricos, por lo que Obama piensa es una decisión errónea.

 

Demócratas y republicanos tienen pendiente llegar a un acuerdo para minimizar el impacto de los recortes financieros en la economía del país, en particular en programas sociales de primer orden que el Ejecutivo pretende mantener en lo fundamental, pero la oposición tiene intenciones de reducirlos.

 

Está por resolver además el tema del probable cierre de una parte de los servicios que prestan agencias federales a partir del 27 de marzo, si los congresistas no aprueban una medida de emergencia o resolución de continuidad que financie sus actividades hasta el 30 de septiembre.

 

La reunión de Obama el miércoles con representantes republicanos era "parte de los compromisos que esta teniendo con los legisladores en un esfuerzo para hablar sobre las oportunidades de compromiso bipartidista sobre una amplia gama de temas", dijo el portavoz Jay Carney. "Cuestiones de presupuesto, de la reforma de inmigración, (y) las medidas para reducir la violencia armada .... el presidente cree que la cooperación bipartidista es posible".

 

Las reuniones son los últimos de un esfuerzo de alcance global que ha incluido la cena con una docena de senadores republicanos, almuerzo con el representante Paul Ryan, republicano de Wisconsin, presidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara, y una serie de llamadas telefónicas a los legisladores.

 

Ryan les digo a lso medios el miércoles que  miembros en la reunión estban agradecidos de tener la oportunidad de una conversación franca con el presidente.