Así es como se conoce a Emanuel Ungaro, de origen italiano, pero nacido en Provence, Francia en 1933; su padre, un sastre exiliado en la ciudad de París, se encargó de que el primer juguete de su hijo fuera una máquina de coser.

 

A la edad de 23 años, cambió su residencia a la capital francesa, y dos años más tarde se convirtió en el asistente de Cristóbal Balenciaga y más tarde de André Courregès. A la edad de 32 años estableció su propia casa de modas, y en el primer desfile declaró que en su colección no habrían vestidos de noche explicando “No son mi estilo. Tengo cierta edad, y diseñaré para mujeres de ésta edad”.

 

Sus característicos estampados y drapeados lo posicionaron rápidamente entre uno de los favoritos de Jacqueline Kennedy y Catherine Deneuve. Sin embargo, en la década de los 90’s su firma decayó gracias a que el glamour decadente de los 80’s se viera remplazado por el estilo desenfadado del grunge.

 

En 1998 Ungaro contrató a Giambatista Valli, para así colaborar en las siguientes colecciones, mismas que tuvieron un gran éxito. Siendo Laura, la esposa de Emanuel, la directora de comunicaciones de la empresa, diversos roces tuvieron lugar entre Giambatista y ella, lo cual tuvo como resultado la salida del co-diseñador en 2004.

 

En 2005 Ungaro decidió retirarse vendiendo la firma por $84 millones de dólares. A partir de ese momento, numerosos diseñadores han tomado el mando de la casa, como lo hizo Peter Dundas (actual director creativo de Pucci), seguido por Esteban Cortazar, quien salió en malos términos, aparentemente por no querer trabajar al lado de Lindsay Lohan como consultora artística. Inmediatamente después tomó las riendas Estrella Archs con quien si colaboró, sin embargo, las críticas de dicha colección (SS 2010) fueron fatales. La siguiente colección Otoño-Invierno 2010 corrió a cargo únicamente por parte de Archs, misma que fuera su última colaboración dentro de la casa.

 

Las últimas temporadas han sido dirigidas por Gilles Deacon, quien poco a poco ha ido adaptando la exhuberancia característica de la casa Ungaro, a la mujer de hoy en día.